Los "otros datos", la otra realidad que vive el presidente de México contrasta con los datos oficiales, tales como los aportados por instituciones como el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), el Consejo Nacional de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) y con el simple sentido común.
La contradicción entre las declaraciones optimistas del presidente Andrés Manuel López Obrador y los datos oficiales es cada día más palpable; por ejemplo, en su reciente visita al puerto de Salina Cruz, Oaxaca dijo que ahora "si tocamos fondo" pero que ya nos vamos recuperando, que ya se van a recuperar los empleos perdidos, que la industria de la construcción va a iniciar con la ocupación y que el mes de agosto será el inicio de la recuperación económica; en ocasiones anteriores ha dicho que ya vamos domando la pandemia; la verdad es que las cosas son exactamente al revés de cómo él nos informa, la realidad es más terca, toca a la puerta de los hogares mexicanos y resulta que según datos oficiales, nuestro país ocupa ya el segundo lugar en Latinoamérica, sólo superado por Brasil, en cuanto al número de contagios y de fallecimientos por covid-19, rondamos cerca de los 400 mil infectados y más de 43 mil muertos por esta causa; resulta que no es verdad que nuestra economía se vaya recuperando, no es cierto que se vaya acabando con el desempleo, por el contrario las cifras aumentan día con día también en este rubro.
La industria de la construcción es el sector de la economía que absorbe la mayor cantidad de mano de obra no calificada del país.A mayor cantidad de obras que se construyen, mayor cantidad de personal empleado, pero según declaraciones del presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Eduardo Ramírez, la industria de la construcción ha venido decayendo consecutivamente durante los últimos 15 meses, Ramírez calcula que a la fecha ya está operando un 60% de las empresas que habían cerrado a causa de la contingencia sanitaria, lo que implica que sólo entre un 50 por ciento y 70 por ciento de los trabajadores hayan recuperado sus empleos; además, estimó que el Producto Interno Bruto (PIB) de la construcción podría contraerse entre 8 y 10 por ciento este año, debido a los efectos del coronavirus.
Si consideramos que los trabajadores de la industria de la construcción, los albañiles, en su mayoría son trabajadores eventuales o trabajadores por tiempo u obra determinada, nos daremos cuenta que es a este sector laboral al que más afecta el desempleo, a este sector de la industria y al comercio informal es al que se van a refugiar los desempleados de otros sectores de la economía, que han cerrado o han suspendido sus actividades a causa del confinamiento y de la crisis económica que, según datos del Banco Mundial estima que el PIB del país llegará a decrecer el 7.5 por ciento, que ya ha venido decayendo.
Es posible que alguien de buena fe diga que el presidente de México tiene "otros datos" que si son reales, que su optimismo obedece a información secreta con la que cuenta el mandatario del país, por lo que sí es confiable creer en las afirmaciones del señor presidente, pero ya son dos años de promesas de un México libre de corrupción, de una economía próspera, de que ahora si se va a acabar con la pobreza, ya tenemos más de 4 meses de pandemia y los datos oficiales desmienten al presidente, todos vemos que lejos de domar la pandemia ahora ya ocupamos el segundo lugar en América Latina en cuanto al número de muertos y contagiados, que no contamos con un sistema de salud que atienda la contingencia, que no existe un plan de gobierno para auxiliar a la población que ha quedado sin empleo, sin alimentos, lo que vemos a diario es que al pueblo pobre se le ha abandonado a su suerte.
El manejo optimista del presidente, sus "otros datos" tanto de la economía como de la pandemia, no es que él tenga información secreta que no le llega al gran público, son el resultado de su plan de campaña electoral, se está preparando para asegurar que su partido Morena gane las elecciones del 2021.
Las mentiras del presidente tienen el propósito de engañar a las masas trabajadoras, los miles de millones de pesos que dice está repartiendo no son para paliar las necesidades de los más desprotegidos, de los desempleados, sino que persiguen el fin de asegurar votos, así se explica que los apoyos y recursos monetarios sólo les lleguen a los afiliados a Morena, tengan o no tengan necesidad, mientras la inmensa mayoría de la población trabajadora sigue padeciendo falta de empleo, falta de salud, falta de apoyos económicos y alimenticios.
La real situación que vive el pueblo pobre de México, la pobreza, el desempleo, la inseguridad, la falta de salud y demás carencias es contra lo que se estrella el ciudadano, el que tiene que salir a la calle a buscar empleo, a buscar alimentos para sus hijos, a buscar mejores condiciones de vida para él y su familia, aunque con ello arriesgue su propia vida.Por simple sentido común nos podemos percatar que los "otros datos" del presidente no son los que vivimos a diario los trabajadores de México.
No nos dejemos engañar, los hechos y los resultados de la Cuarta Transformación saltan a la vista de todos, hablan más que mil palabras, el gobierno de la 4T ha demostrado ser un fracaso porque los intereses que representa no son los del pueblo pobre de México
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