Este año el Movimiento Antorchista continuó consolidándose como la única organización que representa los intereses del pueblo trabajador, con nuestro plan de trabajo que consiste en organizar, concientizar y luchar con el pueblo mexicano, hemos alcanzado metas a corto y mediano plazo, pero aún falta llegar a nuestra meta final, el cambio de la estructura social que nos gobierna, apostando por una que garantice una vida justa y equitativa para todos y no sólo para una clase, porque hemos entendido que para poder lograrlo es necesario que todos entendamos que esto es posible y necesario; a raíz de nuestro planteamiento, hemos venido impulsando en todos los estados, comunidades, colonias y pueblos que se garantice una vida digna para los mexicanos, demandas que van desde los servicios más básicos hasta el cumplimiento de derechos que se encuentran en nuestra Constitución Política, pues ahí se encuentran marcados el acceso gratuito a la educación, la vivienda, la salud y las garantías individuales y grupales que, a la fecha, los gobiernos, pasados y actuales, han olvidado, pero que es necesario que les recordemos y luchemos porque se hagan posibles.
El rezago en infraestructura social que se tiene en Baja California es todavía grande: se vive en carne propia las carencias de servicios como agua potable, drenaje, pavimentaciones, electrificaciones, vivienda, centros de salud y la lista sigue.
En este sentido, nos encontramos en la recta final de la entrega de los pliegos petitorios que se harán a las diferentes dependencias de gobierno y que es necesario que todos los que estamos organizados en Antorcha sepamos qué se solicitará, que se enarbolen las demandas más sentidas en cada comunidad y colonia y que estas demandas y solicitudes estén respaldadas por los demandantes, pues solamente de esta manera se tendrá una lucha tenaz y ardua, impulsando la creación de obras y servicios que hacen falta en nuestras comunidades.
El rezago en infraestructura social que se tiene en Baja California es todavía grande, pues se vive en carne propia las carencias de servicios como agua potable, drenaje, pavimentaciones, electrificaciones, vivienda, centros de salud y la lista sigue; por ello es indispensable que, de manera organizada y unida, resumamos en un documento estas peticiones y que juntos vayamos a pedirles a los delegados, municipios y diferentes dependencias de gobierno que se cumplan estas demandas, no del dinero de su bolsillo, sino del erario al que todos contribuimos con nuestros impuestos, que no se repartan solamente en apoyos sociales que, si bien son un aliciente a la mala vida que tenemos los bajacalifornianos, y en general los mexicanos, es necesario que se invierta en servicios públicos y en otros sectores a los cuales ellos tienen la obligación de invertir.
Por ello, durante esta semana, haremos entrega de los pliegos petitorios en los diferentes municipios, explicando cada una de las necesidades presentadas y trabajando de manera coordinada para poder sacar adelante estos problemas que aquejan a la ciudadanía, pues no son solamente las necesidades de los antorchistas, sino de un pueblo que exige justicia social, al que se le ha tenido en la marginación y el olvido; hoy, en pleno siglo XXI, donde asegura el gobierno “las cosas van bien”, las cosas andan realmente mal, pues no son solamente los servicios, sino que existe una desigualdad social que cada día crece más y más y que, al ver cómo van las cosas, si no se hace algo lo antes posible, después será muy tarde.
Compañeros antorchistas, es momento de reivindicar la lucha del pueblo trabajador, de levantar la voz y de exigir lo que por derecho nos corresponde, es momento de hacer palpable nuestra consigna de que somos un solo hombre y que luchamos bajo un mismo ideal, es momento de demostrar que el pueblo unido jamás será vencido. Todos a la entrega de nuestras demandas y a continuar nuestra lucha, pues este es solo un primer paso en la construcción de una nueva sociedad, la sociedad que todos anhelamos, justa y equitativa.
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