Y nuevamente aparece a escena la tan polémica y mediática Monserrat Caballero, aunque algunos la recuerdan como la Lady Tecate, otros como la Lady Mazapán o la Lady Polvorón, ahora es también conocida como la nueva inquilina; sí, la presidenta municipal de Tijuana que había declarado meses atrás, “que los narcos solo debían de cobrar (piso), a quienes la debían”, ahora resulta que ella se blindará en un cuartel, rodeada de militares, más cuidada que el mismísimo presidente de la república.
Y es que, como dice el mexicano, el miedo no anda en burro, hoy la que se montó en su burro es Montserrat Caballero, quien se aferró, ya sea por su vida o por puro capricho a vivir en el cuartel, dónde se había visto semejante situación, que uno quiera vivir en un palacio y otra en un cuartel, blindados de la vida cotidiana y que a los gobernados se los … les pase lo que les pase.
Un poco de contexto… En conferencia de prensa, la presidenta municipal de Tijuana, señaló que su cambio de residencia a las instalaciones del Ejército no fue una decisión propia, sino que fue una recomendación directa por parte de la Guardia Nacional, debido a las amenazas e incluso ya fue víctima indirecta de un atentado, cuando agredieron a uno de sus escoltas el pasado 17 de mayo. Explicó la funcionaria durante el encuentro con los medios que, el atentado al que se refirió Caballero Ramírez ocurrió la mañana del 17 de mayo de 2023, cuando un comando de cuatro hombres —tres de ellos armados— disparó en contra de una patrulla asignada a la expolicía Rosalva González Molina, alias “La Puma”, encargada del equipo de “avanzada” de la alcaldesa
Esta decisión tiene un fundamento, que más que fundamento, contiene una fuerte crítica al gobierno municipal, para ello una muestra muy “pequeña”, siete homicidios dolosos se registraron en la ciudad el día 16 de abril con corte a las 5 horas de este domingo 17, de acuerdo a los datos proporcionados por la FGE. Con los siete homicidios registrados, se incrementó la cifra a 71 homicidios en lo que iba de abril, 512 en lo que va del 2023, hasta ése día.
Tan solo el año pasado, Tijuana, además de Acapulco, lideraban los primeros lugares, como las ciudades más peligrosas del mundo, esto, sin olvidar que durante este último año llegaron dos flotas de elementos para resguardar la seguridad “de los tijuanenses”, situación que pareciera empeoró el panorama en esta ciudad fronteriza, pues este suceso, pone de relieve que las cosas en materia de seguridad no van nada bien, que no he cierto que en Tijuana no haya desapariciones, que en Tijuana “vamos avanzando”, no he cierto que las cosas van bien, aquí, donde comienza la patria, comienza también una muestra de desestabilidad social, de falta de gobernantes que se cinchen los cinturones para poder en orden esta ciudad cosmopolita.
Que a nadie le sorprenda que las cosas se pondrán un poco más feas, que si crece la inseguridad, los asaltos, la violencia y los problemas que se tienen en la famosa 664, no es porque así lo quieran los ciudadanos, sino es porque no se está poniendo, desde arriba, las cosas en orden; todo estos problemas no los podrá resolver mágicamente una sola mujer u hombre, como siempre lo ha querido hacer ver los funcionarios de 4ta, sino que estos cambios necesitan de una fuerza social que en verdad luche por los intereses de los suyos, una fuerza social que de manera organizada y consciente busque no solo seguridad, sino mejores condiciones de vida para los tijuanenses y mexicanos.
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