Banxico da la siguiente definición sobre la inflación: Es un fenómeno que se observa en la economía de un país y está relacionado con el aumento desordenado de los precios de la mayor parte de los bienes y servicios que se comercian en sus mercados, por un periodo de tiempo prolongado. y es que cuando hay inflación en una economía, es muy difícil distribuir nuestros ingresos, planear un viaje, pagar nuestras deudas o invertir en algo rentable, ya que los precios, que eran una referencia para asignar nuestro dinero de la mejor manera posible, están distorsionados.
En la primera quincena de noviembre el índice de precios se situó en un 7.05% anual, la mayor cifra desde 2001, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Y es que apenas pareciera que vamos saliendo del problema de la pandemia la cual es engañosa, se empiezan a encarecer los alimentos y algunos servicios, provocando que las predicciones del Banco de México respecto a la inflación queden muy abajo (3%).
Y es que a decir de los expertos debemos conocer los tres índices de inflación: la general, la subyacente y la no subyacente. La subyacente agrupa a los productos y servicios más estables. Contrario a la no subyacente que junta a los precios más volátiles o que depende directamente de las decisiones de gobierno. Y la general agrupa ambas partes. Esto es importante conocer ya que la inflación subyacente presentó un aumento del 0.15% quincenal y de un 5.53% anual, la mayor desde abril de 2009 y a no subyacente, que incluye productos más volátiles como los combustibles, subió un 2.29% quincenal y un 11.68% anual. De ésta última también se encuentran además de los combustibles las frutas y verduras que han subido un 13.3% y en la subyacente que es donde se toma en consideración para decidir las tasas de interés, las mercancías suben 7% y los servicios un 3.8%.
Pues bien, los mayores impactos de la inflación fueron en la electricidad y en el tomate verde según informa el Inegi, además se debe considerar que la inflación empieza hacer estragos en el bolsillo de los mexicanos y en la población mundial durante los confinamientos y la poca movilidad por la pandemia, provocando que los precios de los energéticos cayeran, además de problemas en el transporte especialmente el marítimo y la escasez de algunos productos provoca que haya alza de precios.
Según el gobierno de México esto será pasajero y que no debemos asustarnos porque es mundial, y que ya está estabilizando los precios, y pone de ejemplo la venta del gas bienestar, sin embargo, vemos que no ha sido efectiva la distribución de producto. Es decir, ni el Banco de México que está pendiente del aumento de precios y que lleva varios meses subiendo las tasas de interés para tratar de contener el fenómeno, no ha tenido mucho éxito. Los expertos aseguran que, si la inflación en México supera el 7%, sería una de las más graves que se ha visto en 20 años., y es que, de acuerdo con el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath, la inflación podría alcanzar entre un 7.1% o 7.3% en México al llegar a diciembre, lo que se consideraría la mayor variación en 20 años. Si se incrementa este porcentaje, es posible que las personas se queden sin menos recursos para sus gastos, porque va haber un alza generalizada de precios sobre todo los de alimentos, de productos no alimenticios e incluso de servicios. Y a todo esto el gobierno federal solamente ha se pronunciado, minimizando los efectos que ha traído la inflación en este mes, sin embargo, el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) destaca el encarecimiento de 21% que muestra la carne de res al pasar de 139.9 a 170.1 pesos por kilogramo, que la carne de puerco aumentó 13.4% en el último año al avanzar de 77.8 a 88.2 pesos el kilo; mientras, el huevo subió 7.8%, de 33.5 a 36.1 pesos por kilogramo y el pollo, 5.7%, de 70.8 a 74.9 pesos, el precio de la lata de atún se disparó 44% al pasar de 23.7 a 34.3 pesos; en tanto, la tortilla de establecimiento subió 20.4% al subir de 15.7 a 18.9 pesos el kilogramo; también hay aumentos en la tortilla de supermercado (19.7%), chiles en lata (13.2%), harina de trigo (12.7%), harina de maíz (12%), aceites y grasas (10.2%), pan de caja (9.4%) y refrescos (6.3%), el aguacate Hass registró un aumento anual de 66.7% al pasar de 37.58 a 62.6 pesos el kilo. La manzana Golden, con un alza de 60% pasó de 36 a 57.9 pesos el kilo.
Ante esta situación la recomendación de los expertos es anticiparse a la compra de bienes o productos que una familia necesitará en un futuro próximo. Por ejemplo, adquirir útiles escolares antes de que empiece la temporada escolar. Buscar otras fuentes de ingresos. Otra alternativa para afrontar la inflación es buscar fuentes adicionales de ingresos para generar recursos extras, ya que no vemos una estrategia del gobierno para ayudar a la población que menos tiene.
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