En muchas regiones del país se encuentran en situación hídrica crítica, y el noroeste del país no es la excepción. Las 27 presas de almacenamiento que se encuentran en Sonora están al 10.2 % de su capacidad de almacenaje, tomando los datos técnicos del Organismo de la Cuenca Noroeste (OCNO) del mes de mayo de 2024.
Las reservas de agua que tiene la entidad han disminuido aceleradamente desde julio del año pasado, por el aumento del consumo humano, ganadero, agrícola, industrial, comercial y minero del vital líquido.
Por otra parte, debido a la escasez de lluvias en la región en los últimos años, esto ha provocado una disminución acelerada del almacenamiento en las presas de la entidad.
Debido al calentamiento global, las escasas lluvias en los años venideros y el incremento de la demanda en los centros urbanos, se debe empezar a cuidar seriamente el agua.
La pérdida de agua en el sistema era de alrededor del 5 % por mes en promedio y esta descendió en los últimos meses al 2.5 %. La pérdida se hizo menos intensa entre abril y mayo del presente año, pues en tan sólo unas semanas el nivel de embalse bajó solo 0.6 %, debido a varios factores, principalmente por el incremento de la temperatura de primavera y verano, lo cual aumenta el consumo del agua en todos los sectores de la población y sectores productivos. Por ello, cada día que pasa se vuelve más urgente captar, suministrar, administrar y aplicar medidas concretas y efectivas para cuidar el vital líquido.
En enero, el sistema de presas de Sonora se encontraba al 27.19 % de su capacidad total de almacenaje; la cantidad bajó al 20.9 % para el 8 de marzo. El dato difundido era de 15.4 % de nivel de almacenamiento de las diez presas, un 5.5 % menos.
Esto se vuelve más crítico debido a que la entidad tiene el 94 % de su territorio en condiciones de sequía, desde excepcional hasta sequía severa, por un periodo de más de seis meses consecutivos.
En estos momentos, el sistema de presas está al 10.2 % de su capacidad de almacenaje. Se agudizará el problema si tardan aún más en llegar las primeras lluvias.
Los embalses reportan una reserva de 878.2 millones de metros cúbicos de agua; han venido disminuyendo desde julio de 2023. Estos tienen capacidad para almacenar 8 mil 630.5 millones de metros cúbicos; 6 mil 560.1 millones corresponden a embalses del sistema de presas que se alimentan con el río Yaqui, que están al 12.7 % de su capacidad y acumulan 831.6 millones de metros cúbicos, 94.5 % de los 878.2 millones disponibles en todo el estado.
Dos presas están al 0 %: Abelardo L. Rodríguez de Hermosillo y la presa Ignacio R. Alatorre, del río Mátape. La Adolfo Ruiz Cortines, del río Mayo, está al 0.9 % de capacidad.
Otros embalses tienen menos de 10 % de almacenamiento: la presa Cuauhtémoc, 2.3 %; Bicentenario, 2.9 %; y Rodolfo Félix Valdez, 6.4 %. Las únicas dos que se encuentran a más del 10 % son la presa El Novillo al 11.2 % y El Oviachic al 13.1 %. Estos porcentajes de almacenamiento deben preocuparnos y ocuparnos del problema.
En los últimos días, en varias zonas de la capital han empezado a sufrir tandeos los usuarios, mismos que son necesarios y obligados por el agotamiento de las fuentes de abastecimiento. El 30 % del agua que se suministra a Hermosillo proviene de las presas El Novillo y El Molinito, ambas se encuentran a menos del 12 % de su capacidad.
En el año 2023, Hermosillo consumió 126 millones de metros cúbicos de agua y en el 2022 fueron 130 millones, de los cuales la presa El Novillo aportó 30 millones de metros cúbicos y El Molinito 15 millones de metros cúbicos al año.
El restante 70 % del agua, alrededor de 80 millones de metros cúbicos al año, provienen de los mantos freáticos, del agua subterránea o acuíferos que hay en la Mesa del Seri, La Victoria y Los Bagotes.
Tan sólo en la ciudad de Hermosillo, la demanda de agua es superior a la disponible en el acuífero del Río Sonora, por lo que se recurre a la cuenca del Río Yaqui para abastecer lo faltante.
Los agricultores de esta región advierten que el próximo ciclo agrícola podría dejar de sembrar 140 mil hectáreas. Los grandes centros urbanos cada día demandan más agua y se requiere, mediante estudios serios, proyectar a largo plazo nuevas formas de almacenamiento, abastecimiento y cuidados de consumo.
Las autoridades federales, estatales y municipales, en conjunto con la sociedad civil, deberían emprender permanentemente acciones concretas dirigidas a toda la población, priorizando a los que más consumen agua y emprender acciones de ahorro.
Debido al calentamiento global, las escasas lluvias en los años venideros y el incremento de la demanda en los centros urbanos, se debe empezar a cuidar seriamente el agua. El sector poblacional mayoritario, que es el que consume menos agua en el consumo doméstico, debe tener acciones que cuenten y contribuyan a la meta trazada, con mayor razón el sector comercial, industrial, agrícola y ganadero, que consumen cantidades mayores de agua.
Implementar medidas concretas y básicas, que se pueden llevar a cabo, como:
Todo contribuirá a cuidar y ahorrar el agua de hoy que necesitaremos mañana.
Exigir a los Gobiernos en los ámbitos local, regional o nacional que obliguen a pagar a todos los altos consumidores también es útil: el sector industrial debe optar por usar agua no potable en algunos procesos productivos; utilizar sistemas de limpieza en seco en la limpieza al aspirar o barrer, reducir el uso de sustancias químicas que permitan reutilizar el agua.
Usar con eficiencia la maquinaria aprovechando su máxima capacidad y con programas adecuados. En lo comercial, reparar cualquier fuga, filtración o evaporación, optar por aguas no potables para el uso industrial, contar con sensores de control por infrarrojos en las llaves y cisternas que eviten pérdidas por descuidos.
En el sector ganadero, almacenar agua en periodos de lluvia, conocer el consumo de agua del ganado, garantizar el agua para el ganado en tiempos de sequía.
Controlar los niveles de agua, especialmente en tiempos de sequía. Optimizar el uso de agua disponible para dosificarla en temporada de sequía.
El Gobierno debe emprender acciones urgentes que permitan aumentar la captación de agua en varias regiones del estado y emprender campañas intensivas hacia la población en general y todos los sectores productivos para cuidar el agua, que nos faltará mañana.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario