Según información de la Secretaría de Salud, en México se registraron 18 mil 809 nuevos contagios de covid-19 en las últimas 24 horas, los cuales se suman a los dos millones 848 mil 252 casos acumulados. Asimismo, con 450 nuevas muertes, el país también acumula ya 240 mil 906 defunciones a causa del virus SARS-CoV-2, mientras que los casos activos estimados ascendieron a 137 mil 777.
Al respecto, cabe mencionar que desde finales de junio ya nos estábamos enfrentando a una nueva tercera ola de covid-19, pandemia que no ha sido controlada desde un principio, ya que bien se sabe que el Gobierno federal no ha sido capaz de realizar alguna estrategia efectiva para enfrentarla, lo cual implica que la situación siga empeorando y que hayan más incremento de contagios y muertes, toda vez que en México solamente se han aplicado 225 mil vacunas contra el SARS-CoV-2; es decir, solamente el 20 por ciento de la población tiene la dosis completa y a pesar de que las vacunas ya han sido aplicadas se han reportado casos donde personas vacunadas aún se siguen contagiando.
Derivado de lo anterior, pese a los datos ya mencionados y a las miles de defunciones que siguen incrementando, el presidente López Obrador aun insiste en que se tiene que regresar a las labores ordinarias de cada ciudadano y con la terquedad de que se regrese a clases en modalidad presencial de acuerdo al calendario escolar de cada región, no obstante que las cifras indican de que la variante Delta de la covid-19 es más agresiva a sus antecesoras, lo cual implica mayor riesgo de contagios para los jóvenes, por tal motivo, lejos de evitar de que este virus se siga propagando, la medida del regreso a clases presencias que pretende implementar López Obrador está enviando al matadero a los estudiantes, exponiendo a maestros, padres de familias y a la población en general.
Por otra parte, Quintana Roo es una de las entidades con mayor número de casos activos registrados los últimos días, estado donde se ha documentado que los jóvenes han sido víctimas mortales del letal virus, además de que muchas escuelas no están en condiciones para implementar el regreso a clases, toda vez que no se cuenta con la infraestructura y el equipamiento suficiente, así como con los servicios indispensables como el agua, y que los espacios son reducidos, ocasionando que en las pequeñas escuelas, principalmente de las poblaciones y colonias marginadas, no sea viable el aforo requerido por la autoridad sanitaria.
Asimismo, antes de que esta nueva ola se hiciera presente, el presidente López Obrador a través de la Secretaría de Salud implementó el regreso a clases presenciales en algunos estados y un claro ejemplo de la problemática que esto conlleva fue en el estado de Campeche donde de inmediato cerraron las escuelas por el rebrote del virus entre el alumnado y el personal docente.
En este sentido, no estamos en contra de que se implemente el regreso a clases en modalidad presencial, sabemos que es lo más conveniente para el sector estudiantil que no cuenta con aparatos digitales para acceder a clases virtuales, otro tema y situación que no pudieron resolver en donde López Obrador y la SEP fueron ineptos al no garantizar que todo el alumnado continuara con su preparación académica y no se dejará un gran rezago educativo como el que actualmente se está enfrentando.
Desde un principio se pudo evitar que el impacto de la pandemia fuera tan desastroso como lo está siendo en México, si López Obrador hubiese tomado con seriedad la situación y no perder el tiempo en hacer creer que con “estampitas” y “amuletos” se evitaría los contagios, además de las malas decisiones, que ha ocasionado un mal manejo de la estrategia del Gobierno federal ante la pandemia.
Adicional a los resultados caóticos y mortales por el deficiente manejo de la pandemia, López Obrador nos está sacando de “guatemala” para entrar a “guatepeor” al implementar la modalidad presencial del retorno a clases, sin garantizar un plan que garantice que las vacunas estén funcionando en el cuerpo sin que se sigan contagiando, que las aulas cuenten con ampliación, que se tomen las medidas necesarias de sanidad, etc.
Mientras que esta situación siga empeorando las familias y estudiantes deben tomar las medidas necesarias para protegerse, en no asistir a clases, en no poner en riesgo la vida, como irresponsablemente lo está haciendo López Obrador, la ciudadanía debe exigir al Gobierno federal que le brinde prevención ante esta nueva ola de covid-19 porque los principales responsables de las defunciones ocasionadas por esta pandemia en México ha sido el gobierno de la 4T por su mal manejo e incapacidad de su cargo político.
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