Muchos políticos mexicanos que han ocupado cargos de elección popular siempre han pensado en un México mejor para todos, muchos incluso pregonan que México debe ser una potencia en todos los aspectos, en política, economía, tecnología, pero, al parecer, todo ha quedado en ideas, planteamientos, retórica, y de ahí no ha pasado.
En su tiempo, José María Albino Vasconcelos Calderón, conocido como don José Vasconcelos y siendo nombrado Secretario de Instrucción Pública, cuando gobernó como presidente Álvaro Obregón, entre 1921 y 1924, José Vasconcelos repito, se preocupó realmente por la educación del país, buscando con esto formar a los mexicanos y prepararlos para el futuro venidero; sin embargo, muy pocos realmente se han preocupado por la educación para formar verdaderos intelectuales que sepan identificarse con su pueblo, muchos hombres y mujeres se han preparado, eso es cierto, son generaciones de intelectuales que han buscado incluso gobernar a nuestro país, pero desgraciadamente por muchos deseos y promesas que hayan hecho, todo queda solo en eso, y como digo al principio de este artículo, todos los políticos mexicanos que han llegado al poder, me refiero a la presidencia de la república, siempre han manifestado que su proyecto político del momento es el mejor y es la alternativa que México necesita para resolver tantos problemas a lo largo de la historia mexicana.
Lo cierto es que, por más que hayan dicho y sigan diciendo que cada proyecto político es la mejor opción del momento, los hechos han demostrado y siguen demostrando que no son los mejores ni podrán serlo, porque se siguen moviendo solamente en un círculo vicioso y dentro del mismo modelo neoliberal que ya conocemos.
Podemos aceptar que avances ha habido, pero no han sido los suficientes para que nuestro país refleje un alto grado de progreso y de desarrollo en todos los ámbitos de la sociedad, ya que, por un lado, viven los que lo tienen todo, y por otro, los que padecen de justicia social, y esto es lo criticable porque, a pesar de tantos años pregonando lo mismo y de que muchos personajes han pasado por la presidencia de la república, ninguno ha logrado que su proyecto político sea el mejor y aminore la pobreza aguda que, desde antaño, permean en los sectores sociales más vulnerables, y además, porque no se ve reflejado en el progreso de la clase trabajadora, de ahí la importancia de plantearse un verdadero proyecto de nación y que sirva en serio, para que nuestro país progrese en todos los aspectos y en todos los sectores sociales.
La esencia del problema, por lo tanto, no está nada más en la estructura del proyecto, sino también en los hombres y mujeres que deben ejecutarlo, mientras estos últimos no tengan amplitud de horizontes, así podrán cambiar muchas veces el nombre del proyecto, si los ejecutores siguen siendo políticos enanos, no habrá proyecto político progresista.
Así vemos, hoy en día, como los políticos y politiquillos de Morena se rasgan las vestiduras buscando convencer a los mexicanos de su proyecto cuando ni ellos saben a dónde van, tachan de traidores, por ejemplo, a otros mexicanos por el simple hecho de no lograr consenso mayoritario para su reforma eléctrica, se manifiestan en las redes sociales como los verdaderos patriotas y difunden calumniando a todo mundo como si ellos tuvieran la verdad absoluta, no aceptan la discrepancia de opinión, acusan a otros políticos mexicanos de corruptos como son los expresidentes, preguntan si queremos que regresen ellos para seguir gobernando al país, son preguntas fuera de lugar y de tiempo, porque claro que no regresarán, ya lo fueron, ya jugaron su papel, aquí no importa las siglas del grupo político o partido que los haya arropado, como dije anteriormente, aquí el problema son las personas, la concepción que tienen acerca de los problemas y que tan científicamente los han estudiado para poderlos erradicar poco a poco, aquí está el problema.
Los morenistas que gobiernan hoy han sido parte de otros partidos políticos como el PRI, EL PAN, PRD, PMS, PCM, y qué cambiaron en su momento, en su tiempo, hoy están en Morena y están gobernando al país, pero parece que no tienen claridad de las cosas; los morenistas tienen que aceptar que su proyecto ha fracasado y la historia no los va a esperar, tienen que aceptar que existe otro tipo de proyecto político y, por lo tanto, una reorganización de lo existente, del estado de cosas actuales, porque lo que han hecho hasta ahora es seguir conservando el mismo proyecto que los anteriores gobernantes, solo le han cambiado la forma pero el mecanismo (el fondo) sigue siendo el mismo, siguen dando vueltas en círculos y no en forma ascendente.
Por otra parte, quieren convencernos también que eliminando a los diputados plurinominales se resuelven en gran medida los problemas sociales, repito, no están haciendo un estudio científico de la realidad, solo siguen pensando en venganzas políticas para seguir destruyendo al país, lo quieren desintegrar para que solo gobierne un rey, y si esto están buscando, entonces se acabó la democracia que tanto pregonan.
Ante esta situación tan compleja, el Movimiento Antorchista Nacional está planteando un verdadero proyecto de nación, incluyente y que sabemos dará los resultados que México necesita porque ya lo hemos puesto en práctica. Ojalá los mexicanos bien nacidos sepan valorar y respaldar este proyecto porque solo así podrá cumplirse lo que el pueblo trabajador de México lleva demandando durante muchos años, una verdadera justicia y paz social para todos.
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