MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

En México la desigualdad también mata

image

Nuestro país está pasando por una situación económica complicada, que ha afectado profundamente los bolsillos, principalmente de la clase trabajadora de nuestro país, y, por si esto fuera poco, ahora se avecina una cuarta ola de contagios en todo el mundo que afectará a México y las consecuencias, tanto económicas, y pérdidas humanas, que impactarán a sus habitantes, serán lamentables.

Pero como sabemos, no todos correremos con la misma suerte, pues con la gran desigualdad social que impera en México, la clase más vulnerable, tendrá las consecuencias más difíciles y las menores herramientas para afrontar lo que se avecina. Veamos.

Datos del portal El Economista, menciona lo siguiente: “Entre las trabajadoras y los trabajadores que laboran en el sector formal, los contagios de covid-19 le suceden por igual a quienes ganan menos y a quienes ganan más. La pandemia, al parecer, ha llegado a todo tipo de hogares en México. Pero el desenlace de la enfermedad sí que no es el mismo, quienes reciben los salarios más bajos tienen hasta cinco veces más probabilidades de morir que el personal mejor pagado en el país”

Es decir, los trabajadores mexicanos, que, en su inmensa mayoría, cuentan con salarios miserables que nos les alcanza ni para lo más indispensable para vivir, son los que mayor probabilidad tendrán de morir ante otra ola de contagios en el mundo.

Solo como ejemplo, en nuestro estado, la situación se torna difícil pues datos de la Secretaría de Salud del gobierno del estado, menciona que Colima mantiene su nivel de riego moderado en amarillo por Covid-19; sin embargo, se encuentra a dos puntos porcentuales de pasar a nivel de riesgo alto, al color naranja del semáforo epidemiológico.

En la rueda de prensa que ofrece en redes sociales de la dependencia, la Secretaría de Salud, Martha Janeth Espinosa Mejía, dijo que en las últimas cuatro semanas se tienen 40.8 veces más casos que los registrados semanalmente hace un mes.

Con ello, agregó que el avance en las mediciones del semáforo de riesgo epidemiológico demuestra un crecimiento en 4 de los 10 indicadores: en la tasa de reproducción efectiva, que pasó de 1.10 a 1.13, y en la incidencia de casos estimados al subir de 14.3 a 119.2 por cada 100 mil habitantes.

El porcentaje de positividad del virus SARS-CoV-2 pasó de 15 a 43 % y la tendencia de síndrome COVID-19 escaló de 0.76 a 13.92, todo lo cual da una ponderación de 18 puntos, lo que coloca al estado a 2 puntos porcentuales de alcanzar el riesgo alto y pasar a semáforo naranja.

De la misma manera, la Secretaría de Salud precisó que la variante Ómicron tiene menor virulencia, pero esto no significa que cause menos gravedad.

Reafirmó que la infección por el SARS-CoV-2 CON en cualquiera de sus variantes, Delta u Ómicron, también causa gravedad, muerte, secuelas, ausentismo escolar, laboral y pudiera hacer colapsar los servicios de salud.

Así que ya podremos imaginar quienes serán los que cargarán en sus hombros las consecuencias de las malas políticas aplicadas por parte del Gobierno Federal. Creo que los “remedios caseros y el vaporub” del presidente de la república ahora si no funcionó como el esperaba, pues ni él pudo salvarse del contagio.

Pero como dije al principio, los mexicanos más pobres son los que pagaran las consecuencias, pues no creo que el presidente de la república tenga que hacer fila al IMSS o a cualquier centro de salud público, ni esperar largas horas para ser atendido, ni salir a buscar el pan para su familia, pues evidentemente cuenta con todas las condiciones para ser atendido por los mejores especialistas.

A los pobres no nos queda de otra, salir a exigir mejores condiciones de vida, por una más digna para todos. De no ser así, las consecuencias serán lamentables. Que conste.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más