Esta semana se cumplen dos años de que los efectos del huracán Grace azotaran a Puebla, lo cual provocó deslaves, fuertes lluvias, inundaciones y daños severos en varios municipios, provocando la muerte de nueve personas, entre ellas dos de Tlaola. Además, destrozó alrededor de 20 mil viviendas y por lo menos 18 mil hectáreas de cultivo de maíz y frijol que representaban un 70 por ciento de la cosecha total de ese entonces en el estado.
Huauchinango, Tlaola, Chiconcuautla, Jalpan y Jopala estuvieron dentro de la lista de los 63 municipios de Puebla afectados por el huracán y en ese momento el gobierno federal, estatal y municipal encabezados por Morena brillaron por su falta de preocupación para brindar apoyo inmediato a las víctimas.
Después de un par días sin respuestas favorables; organizaciones, autoridades comunitarias y personas afectadas comenzaron a movilizarse a las oficinas gubernamentales como las de “Bienestar” y a las presidencias municipales para pedir apoyos ya que lamentablemente algunos lo perdieron todo; la necesidad era tan grande que algunos pueblos incluso se atrevieron a tomar y cerrar la autopista México-Tuxpan para exigir ser atendidos por el gobierno, en ese momento la solución que obtuvieron fue que regresaran a sus municipios y comunidades de origen a esperar la visita de los “Siervos de la nación” los cuales levantarían un censo calle por calle de todas las personas afectadas para que pudieran ser acreedoras a todos los apoyos que daría el gobierno.
Huauchinango, Tlaola, Chiconcuautla, Jalpan y Jopala estuvieron dentro de la lista de los 63 municipios de Puebla afectados por el huracán y en ese momento el gobierno federal, estatal y municipal encabezados por Morena brillaron por su falta de preocupación para brindar apoyo inmediato a las víctimas
No se realizó el censo como se acordó, y los pocos apoyos que se entregaron fueron a parar a manos de los familiares y amigos de los “Siervos de la nación”. Un mes y medio más tarde Huauchinango recibió la visita de López Obrador, presidente de la República, quien con su discurso demagógico creyó que calmaría los ánimos de los inconformes los cuales viajaron desde todos los rincones de la Sierra Norte para manifestar su inconformidad, al no poder darles atole con el dedo a los más de 700 manifestantes emprendió la huida, lo podemos leer claramente en la publicación de Abelardo Domínguez del 3 de octubre de 2021 en el portal desdepuebla.com: “López Obrador no dedicó tiempo para escuchar a los ciudadanos que como pudieron se trasladaron de todos los rincones de Puebla para manifestarse y dar a conocer los cientos de tropelías que presidentes municipales abanderados por la 4T cometen en los pueblos”.
Este fue el resultado de las ocurrencias del presidente de la República y de Morena puesto que fueron ellos los que eliminaron el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) , fideicomiso que los gobiernos pasados destinaban para apoyar a las entidades federativas en caso de desastres naturales.
Finalmente, los afectados, los que necesitaban la ayuda, se quedaron esperando y a dos años de aquella tragedia continúan esperando a que los volteen a ver, personas que perdieron todo, que hasta la fecha viven apenas en una cerca de tablas, cubiertas por unas cuantas láminas tienen la esperanza de que Andrés Manuel López Obrador cumpla con su promesa de campaña de “primero los pobres”.
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