A pocos días de que Morena elija sus corcholatas, los mexicanos tenemos que pensar bien qué debemos hacer para cambiar el rumbo de nuestro país. Es necesario aprovechar las experiencias del pasado, tales como: en el año 2018 el grupo en el poder apoyado por el capital movió un aparato propagandístico enorme con el fin de apuntalar la cuarta transformación; engañó al pueblo con su discurso y con un eslogan “por el bien de todos, primero los pobres”, una excelente frase, falsa y llamativa.
Así lo reconoció el mismo presidente en su Quinto Informe de Gobierno, para AMLO no es un asunto personal, es un asunto de estrategia política ayudar a los pobres, vamos a la segura porque ya sabe que cuando se necesita defender la cuarta transformación se cuenta con ellos.
Durante cinco años el paraíso prometido solo fue para unos cuantos, quienes están disfrutando de ganancias de billones de pesos, en contraste, el respaldo al pobre quedó en el papel. La pobreza no ha disminuido en los últimos cuatro sexenios. No han sido suficientes los programas de transferencias monetarias. La razón del fracaso de las políticas sociales en disminuir la pobreza y la desigualdad se debe a la concepción equivocada de los problemas, AMLO cree que el problema principal en el país es la corrupción y como su diagnóstico es equivocado, también la solución.
En 2018, Morena se encontró con dos disyuntivas: la primera, impulsar el modelo neoliberal por uno más racional y equitativo o hacerse como don Lolo, entregando dinero a los de abajo para medio controlar y darles grandes cantidades a los grandes empresarios. A los pobres se les da apoyo en miles y a los ricos en billones de pesos. La segunda, el resultado; unos pocos ganan millones y el número de pobres crece, la economía se estancó, no se mueve y, agua que no se mueve se pudre.
Los hechos de este gobierno los podemos contar por qué son muchos y malos: recortes salariales, falta de plazas para maestros, cero apoyo a las organizaciones civiles y sociales, represión al pueblo que pide ser atendido, el cierre de las escuelas de tiempo completo, falta de obra pública, desapareció el seguro popular, poquísimo apoyo al campo, la educación pública hecha pedazos y desprestigiada, la famosa austeridad republicana, la violación de las leyes electorales de parte del todopoderoso, la imposición de candidatos.
Si todo lo prometido no se cumplió, ahora qué puede ofrecer la 4T, una transformación que en cinco años quedó agotada, así lo dicen sus hechos y sus resultados.
¿A dónde hemos llegado por concentrar tanto poder en manos de una sola persona? Necesitamos un verdadero cambio, en eso muchos estamos de acuerdo, que la solución está en conformar una organización, con una estructura que esté dispuesta a luchar, no solo en la lucha electoral o sindical, sino a decidirnos cómo preparar al pueblo a la lucha por un mejor sistema en nuestro país.
Ahora, ¿qué nos pueden ofrecer? Lo mismo, mentiras, amenazas, calumnias, inseguridad, chantaje, solo le queda su última arma a utilizar, que es la estructura de los estados gobernados por Morena para someter por la fuerza a las grandes mayorías. Su relación con los grupos de la delincuencia organizada, la Guardia Nacional y el Ejército.
Pero se vislumbra una luz al final del túnel, se está dando una importante coyuntura política que todos debemos aprovechar, creo que todos podemos ver y escuchar, que los ricos con AMLO ganan, que los pobres solo reciben lo necesario para sobrevivir, con programas que se habían aplicado en el pasado y que la 4T dice está aplicando bien. En la realidad eso no es cierto, ellos mismos engañan con sus otros datos. Los resultados nos dicen que la 4T está equivocada.
La política económica y la estrategia del combate a la pobreza han sido equívocas, así como el combate a la delincuencia que nos colocó con más de 800 mil homicidios dolosos. El país crece en 0.5% según datos oficiales, cuando lo prometido fue más de 6%, la pobreza sigue creciendo, los programas asistenciales no son suficientes, seguimos pobres, porque más de la mitad de la población está en pobreza.
¿A dónde hemos llegado por concentrar tanto poder en manos de una sola persona? Necesitamos un verdadero cambio, en eso muchos estamos de acuerdo, que la solución está en conformar una organización, con una estructura que esté dispuesta a luchar, no solo en la lucha electoral o sindical, sino a decidirnos cómo preparar al pueblo a la lucha por un mejor sistema en nuestro país.
La cuarta transformación se equivocó, no cumplió, el cambio no fue para mejorar, fue para empeorar, los hechos nos dicen que fracasó, que urge un acuerdo de todos los mexicanos. La realidad nos dice que la solución a los problemas del país no está en la cuarta transformación ni en sus “corcholatas”, no es la corrupción el problema principal, es el desarrollo anormal desmesurado del ¨Poder Ejecutivo.
AMLO sostiene que el problema principal es la corrupción, los antorchistas sostenemos que el problema principal es la pobreza, que tenemos que combatirla desde la raíz, porque el mal de la corrupción es la pobreza y la madre de la pobreza es el neoliberalismo. AMLO y sus “corcholatas” mienten, no dicen la verdad, sus rollos buscan apantallar para ganar simpatía, no dicen nada de cómo mejorar la educación, cómo darle vivienda, salud, medicina, buenos hospitales, mayor seguridad, apoyo al campo para que nuestro país crezca y así mejoren las condiciones de todo el pueblo mexicano.
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