Un lleno total en el salón de los Espejos en Iztacalco, esperaba la llegada del líder histórico del Movimiento Antorchista en el Estado de México, Jesús Tolentino Román Bojórquez, mérito reconocido por su gran trayectoria e inteligencia puesta al servicio de los más pobres de nuestro país, trayectoria de varias décadas dentro de las filas antorchistas, con la conquista de grandes éxitos.
Cientos de integrantes de esta organización social, de los comités antorchistas en las colonias o plenistas, como se les llama también, esperaban ansiosos desde las 9:00 de la mañana la llegada del biólogo, llamado así cariñosamente, para escucharlo de viva voz y atender sus sabias palabras.
Los plenistas son habitantes de las colonias, que al conocer a Antorcha se integran al trabajo y se convierten en portavoces con sus vecinos de las acciones positivas que realiza Antorcha, además ayudan a esta noble labor que la organización se ha impuesto desde su nacimiento hace cinco décadas: educar al pueblo pobre de México, por lo que se reúnen con la gente y estudian con ellos algunos materiales de literatura, historia, o sobre el funcionamiento de la sociedad.
Y justamente esta conferencia que Jesús Tolentino impartió, se refirió a las tareas de los plenistas antorchistas en la Ciudad de México, las tareas más inmediatas que deben realizar para que a través de la educación y concientización de las masas trabajadoras Antorcha logre materializar otra de las tareas fundamentales que se ha impuesto: cambiar el modelo económico en México, y con ello acabar con la pobreza que afecta a 100 millones de mexicanos, aunque las cifras del gobierno se escondan, pues se tiene plena certeza que en el sexenio pasado, a pesar de lo mucho que se ha prometido de que sería un gobierno cercano a los pobres y se repitió al cansancio el lema de “primero los pobres”, la pobreza propiamente aumentó de manera alarmante, y con ello todos los problemas sociales que conlleva: la delincuencia, violencia, inseguridad y demás, que los mexicanos estamos padeciendo.
Después de recibir toda la ovación, el biólogo Jesús Tolentino, como reconocimiento a su gran labor incansable y desinteresada, los antorchistas capitalinos escucharon con mucha atención las palabras de la dirigente del antorchismo en la Ciudad de México, Gloria Brito Nájera, quien agradeció la presencia de todos los plenistas y del biólogo, además de exhortarlos a poner mucha atención y a no echar en saco roto las palabras del líder social, sino hacer caso y poner en práctica los consejos que se darían en esa ponencia.
Y se dio lugar a la conferencia de este gran líder social, que además gobernó el municipio de Chimalhuacán, Estado de México con gran inteligencia. Durante su mandato, este municipio pasó de ser considerado uno de los peores por el alto índice de inseguridad y por la carencia de servicios, a ser uno de los mejores, con la mayor calidad de vida y bienestar de la población.
Tolentino Román, en primer lugar, recalcó los objetivos que el Movimiento Antorchista se ha echado a cuestas y que radican en la lucha porque la riqueza del país se distribuya de mejor manera, y que la pobreza se reduzca y llegue, en un momento dado a desaparecer, dijo que para que esto ocurra es urgente que las masas trabajadoras estudien el funcionamiento de la sociedad, se concienticen y hagan suya esta lucha para que las fuerzas se multipliquen y se pueda lograr el cometido.
Además, que todos unidos deben luchar para solucionar tantos problemas y tan graves que aquejan al país y a los mexicanos, porque el objetivo es tomar el poder político a través de la vía democrática, para, desde ahí, desde el poder, hacer un cambio de rumbo en México, no como ahora que la riqueza se sigue concentrando en unas cuantas manos, en unos cuantos millonarios que explotan a sus anchas los recursos naturales y logran enormes ganancias en detrimento de la calidad de vida de millones de mexicanos, que ahí están, entre la masa de mexicanos que no cuentan con lo más indispensable para vivir de forma decorosa, y que en pleno siglo XXI mueren de enfermedades perfectamente curables, señalando que el 77 por ciento de la población mexicana padece pobreza.
Las palabras de este gran líder social fueron escuchadas por los presentes, quienes brindaron su apoyo para que continuara con su discurso, donde hizo una severa crítica al sexenio que acaba de culminar por toda la serie de problemas que no sólo no solucionó, sino que vino a acrecentar, pues en todos los rubros se nota el mal gobierno que tiene el país, ya que el sistema de salud está colapsado, el transporte público es un caos y la educación va de mal en peor.
Tolentino Román hizo énfasis en la necesidad de implementar un nuevo modelo económico, señalando que este planteamiento fue hecho por el propio secretario general del Movimiento Antorchista, Aquiles Córdova Morán, quien al hacer un análisis profundo de la sociedad y de nuestro país, concluyó en que es urgente implementar cuatro ejes principales para que los mexicanos podamos vivir mejor y en un país más justo para todos: 1) empleo para todos los mexicanos en edad de trabajar, 2) salarios dignos que ayuden a adquirir la canasta básica, que cada día se va encareciendo más y más, dejando muchos mexicanos indefensos ante esa calamidad y haciendo que cada día sea más difícil que las familias pobres puedan alimentarse de manera eficiente y puedan alimentar a sus hijos, mucho menos pueden cubrir sus necesidades apremiantes; 3) que el gasto social de los tres niveles de gobierno privilegien a todos los cien millones de mexicanos que padecen pobreza y 4) que los ricos paguen más impuestos para que el país pueda tener solvencia para resolver las necesidades de los mexicanos.
Ya entrado en materia, Tolentino Román exhortó a los presentes a seguir dentro de las filas antorchistas, asegurando que el cambio sólo puede provenir de la concientización de las masas y de la ejecución de los objetivos, pues dijo, para lograrlo se necesita de masas inteligentes y conscientes y sobre todo bien firmes en la necesidad de lograr sus metas propuestas, no apáticos sino conscientes y decididos.
Los antorchistas manifestaron salir fortalecidos de esta ponencia, en la que se les otorgaron muchos datos específicos, los cuales señaló Tolentino Román, deben ser aprendidos al pie de la letra por los antorchistas, para darlos a conocer a más y más mexicanos, que desgraciadamente no pueden informarse correctamente, ya que la información que les llega es errónea y tergiversada.
Los planteamientos fueron expuestos y recibidos con gran ánimo por los presentes para luego dar lugar, pasado de las 13:00 horas a un bonito evento cultural, con la presentación de hermosos cuadros de danza, baile y poesía que deleitaron a los presentes y les recordaron que en Antorcha, además, se fomenta la cultura y el arte para deleite del espíritu de los seres humanos.
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