MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Día del Trabajo, un grito de lucha por la emancipación

image

A lo largo de la historia, los movimientos obreros han sido respuesta a las precarias condiciones de trabajo y de vida a las que se ha visto sometida la clase trabajadora. Tras la Revolución Industrial, la explotación laboral, los salarios ínfimos, las jornadas interminables, el trabajo femenil e infantil se intensificaron, dando lugar al surgimiento de un movimiento obrero cada vez más fuerte.

En muchos países, la lucha de los obreros por la reivindicación de sus derechos laborales creció y es en 1889 que el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional celebrado en París instituyó el 1° de mayo como Día del trabajo, con el propósito de reivindicar la lucha de los Mártires de Chicago.

Estos participaron en una huelga generalizada que paralizó cerca de 12 mil fábricas el 1° de mayo de 1886, reclamando a patrones y gobierno el cumplimiento de sus demandas fundamentales como la reducción de la jornada de trabajo y la elevación de los salarios. Los obreros fueron reprimidos, encarcelados y ajusticiados por reclamar sus derechos.

La fecha se conmemora en más de 80 países como un símbolo de la lucha por la justicia social y la reivindicación de los derechos laborales.

La fecha se conmemora en más de 80 países como un símbolo de la lucha por la justicia social y la reivindicación de los derechos laborales.

Pero si bien recientemente conmemoramos la gran hazaña que nuestros antepasados hicieron, la situación actual no sólo nos exige conmemorar la fecha sino luchar, y no solamente un día, sino los 365 días del año por mejorar la calidad de vida de las clases trabajadoras.

Las condiciones de las familias obreras se hacen más precarias cada día, al igual que la de todo el pueblo, se vuelve más dura y angustiosa que en épocas anteriores.

Nuestra entidad, a pesar de que se señala como un Estado donde se promovieron 440 mil empleos, que registró una tasa de desocupación del uno por ciento, menor a la nacional de 2.3 % según el reporte de desocupación emitido por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) correspondiente a marzo.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que los trabajadores registrados disminuyeron de 437 mil 479 a 436 mil 351 de febrero a marzo de 2024, es decir, se perdieron mil 128 empleos en un mes.

En promedio, cada día unos 36 yucatecos quedaron desempleados y de los 436 mil 351 puestos registrados en el IMSS, 386 mil 986 son permanentes y 49 mil 675 son eventuales.

En Yucatán, trece de cada 100 trabajadores asegurados son temporales y 87 son permanentes. A esto le sumamos los bajos salarios y la desigualdad existente entre hombres y mujeres.

De acuerdo con datos del IMSS, las trabajadoras yucatecas son las peores pagadas en toda la Península, además de la brecha salarial existente por género, ya que el salario promedio mensual de las mujeres fue de cinco mil 406.64 pesos; es decir, dos mil 278 pesos (29.6 % menos) que la media de siete mil 684.66 que les pagan a los hombres. 

Al día, ellas ganan 180.22 pesos y los hombres, 256.15 pesos, una diferencia de 76 pesos. Datos de octubre a diciembre de 2023.

Además, según nota del Diario de Yucatán del 11 de abril de 2024, la Secretaría de Economía (SE) de México informó que Yucatán es el líder en población ocupada entre las entidades de la Península; pero que nuestro Estado es el rey de la informalidad, con el 61 por ciento (1 millón 472 mil 526 trabajadores) y que las mujeres de Yucatán son las peor pagadas.

Los trabajadores informales del estado apenas ganan 5 mil 090 pesos en promedio al mes, es decir, 169.66 pesos al día.

Otro dato preocupante que arroja la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del cuarto trimestre de 2023 es que, en Yucatán, de un millón 207 mil 44 personas ocupadas al cierre del año pasado, solo 408 mil 310 contaban con seguridad social.

Esto importa porque el acceso a la seguridad social está relacionado con otros derechos laborales como la salud y crédito para la vivienda.

Claro que uno de los grandes obstáculos es la informalidad, esquema en el que trabajan el 61 % de los yucatecos; pero el problema no es que la gente quiera emplearse en la informal idad, sino que no tienen otra opción para sobrevivir.

Así nos encontró este año a los yucatecos, el Día del Trabajo, la indiferencia de los distintos niveles de gobierno por mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y la rapacidad del sistema económico vigente hacen de ellos seres inermes, situación que solamente se podrá remediar si los trabajadores toman conciencia de la importancia de su participación en el proceso de creación de toda la riqueza social, que día a día engorda los bolsillos de los grandes potentados que crean fortunas escandalosas, mientras miles de trabajadores y sus familias carecen hasta de lo indispensable.

Por eso, el Día del Trabajo debe dejar de ser solamente una fecha para conmemorar; se necesita organización y conciencia de los trabajadores para luchar; retomar con decisión, valentía y compromiso el ejemplo de hombres y mujeres que con su lucha lograron que el mundo volviera los ojos a ellos, porque se rebelaron en contra del estado de cosas existente aun a costa de su propia vida.

Es hora de que los trabajadores mexicanos entiendan que urge hacer de nuestro país una patria más equitativa y generosa con todos sus hijos.

Para lograr eso, hoy no basta luchar por mejores condiciones de trabajo, incremento del salario, mayores prestaciones; de lo que se trata es que las masas empobrecidas entiendan que las denigrantes condiciones en las que viven solamente cambiarán transformando de raíz el sistema económico vigente, tomando el poder político para lograr mejores condiciones de vida para todos.

Pero esa honrosa tarea sigue estando en manos del pueblo mismo, porque ya lo decía el más grande humanista y revolucionario alemán, Carlos Marx:

“La emancipación de los trabajadores debe ser obra de ellos mismos; los esfuerzos de los trabajadores para conquistar su emancipación no deben tender a crear nuevos privilegios, sino a instituir para todos los mismos derechos y deberes”.

Esa debe y es la tarea de todo el pueblo, pero encabezada por los trabajadores, y es a lo que llama hoy el Movimiento Antorchista Nacional.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más