*El alcalde incumple compromisos y se burla de las necesidades de los pobres
Al alcalde de Calkiní
A la opinión pública:
Desde hace cuatro meses, los antorchistas de Calkiní, hizo uso del legítimo derecho a la petición, los antorchistas ingresamos un pliego petitorio ante la Secretaría del Ayuntamiento, en el entendido de que la máxima autoridad municipal vocero del desarrollo y bienestar del pueblo atendería y daría solución a cada una de las peticiones.Sabedores de los "trámites legales" que hay que cumplir por dicho pliego de peticiones, se dio puntual cumplimiento, con la finalidad de no dar motivo a la duda, acerca de la legalidad de nuestra petición.
Cabe destacar que en el municipio habitan a próximamente 54 mil personas, de los cuales, según el Coneval, el 60.5% de la población vive en condiciones de pobreza, y el 20% en pobreza extrema, es decir, que no cuentan ni siquiera con lo mínimo necesario (1 dólar al día o 18 pesos diarios) para sobrevivir.Aunado a ello, el 28.8% carece de vivienda, el 47% carece de los servicios básicos de vivienda (agua, luz, drenaje, pavimentación, etc.), y el "70%" carece de servicios de seguridad social.
Así pues, nadie en su sano juicio puede cuestionar que las gestiones de los peticionarios no son para nada, invención o capricho de alguien; ni tampoco son demandadas enarboladas con el propósitos de entorpecer o generar inestabilidad, pero a estas alturas nos queda claro la poca disposición del presidente a atender nuestras peticiones; las demandas de los antorchistas no son para ensombrecer o atacar su administración, por el contrario, todas las peticiones obedecen a necesidades reales consistentes, básicamente, en apoyos para mejorar la vivienda (programa de baños, pisos, techos, etc.), pavimentación de calles, ampliación de la red de alumbrado público, cemento para obras públicas, apoyos asistenciales de abasto, sólo por mencionar algunas; de resolverse, se beneficiarían, aproximadamente, mil familias de las comunidades de Dzitbalche, Santa Cruz Pueblo, Sahcabchen, Concepción, Pucnachen y Santa María.
Como queda dicho, después de gestionar bajo los esquemas establecidos y con todo orden legal, hemos conseguido únicamente la atención del Secretario Particular del alcalde y con funcionarios menores de Desarrollo Social y Planeación, con quienes sostuvimos un breve e infructuoso diálogo; y finalmente con el edil, José Emiliano Canul Aké, quien después de recibirnos, realizó compromisos aparentemente serios ante los antorchistas, porque reconoció que las solicitudes eran justas y necesarias y se pronunció en buscar solución inmediatamente, sin que hasta ahora ello se haya traducido en hechos contantes y sonantes.Lamentablemente las palabras del edil han quedado en serio cuestionamiento.
Recordemos a Canul Aké, durante su campaña y para no fallar con la mala tradición- se hizo de promesas ante todas las comunidades del municipio, que de triunfar en las elecciones le daría un nuevo rostro a Calkiní, lo que le permitió obtener la victoria en las 56 casillas que se instalaron en el municipio.Pero en los hechos se deshizo de todos sus compromisos.
El antorchismo calkiniense siempre ha sido aliado del diálogo y del derecho con el objetivo de que se resuelvan las demandas de los pobres, porque son justas y urgentes y, porque además es un derecho constitucional de todos los mexicanos.
Así pues, ante la insensibilidad y actitud pusilánime del edil Canul Aké, los antorchistas marcharán por las principales calles de la cabecera municipal este viernes 22 de los corrientes, para exigir que se haga efectivo los compromisos pactados.
¡Si hubiera soluciones no habría marchas ni plantones!
¡Unión, fraternidad y lucha!
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