Nada refleja mejor la realidad de México y los mexicanos que la siguiente expresión salida de un campesino de Huitzilan, Puebla; don Eulogio Bonilla: “¿Qué está pasando con López Obrador? Estaban bonitos sus cuentos, pasó su campaña y ¿qué hizo? No hizo nada”.
Es de conocimiento público que la mentira es la herramienta favorita del presidente Andrés Manuel López Obrador para ocultar los pésimos resultados que ha tenido su gobierno en materia de desarrollo económico y social, con su mal llamada Cuarta Transformación. Pruebas, una sencilla, pero muy reveladora: 89 afirmaciones no verdaderas, en promedio, en cada una de sus conferencias mañaneras, de acuerdo con el estudio de la consultora política SPIN, que, además, reveló que en los primeros mil días del gobierno morenista, el mandatario escupió 61 mil 79 mentiras. ¡Vaya! ¡Gran capacidad de fantasear y contar cuentos!
Los números son consecuentes con los hechos. En repetidas ocasiones el presidente ha hablado de grandes apoyos, inversiones históricas, atención a las demandas, pero al pueblo no le llega nada. Haciendo uso de su retórica de charlatán, lanza la piedra, pero esconde la mano, calumnia, difama y, sobre todo, miente cuando de beneficios para el pueblo se trata.
López Obrador miente, no hay apoyos a los damnificados. Hace unos días, lamentablemente partió de este mundo nuestro querido compañero Diego Velázquez Velázquez, un plenista de muchos años de la localidad de El Crucero, en el municipio de Hueytlalpan, en la Sierra Norte del estado de Puebla. Don Diego era un campesino muy humilde, quien hace casi un año fue de los damnificados por el huracán “Grace”; entonces, denunció a través del portal de noticias Contigo Puebla que no recibió ningún apoyo, a pesar de que el gobernador del estado, Miguel Barbosa, y López Obrador presumieron el envío de ayuda.
Don Diego contó al portal: “eran como las 11:00 de la noche cuando empezó el viento; fue tan fuerte, que vi cómo se llevaba una parte de mi techo. Cuando llegó la 1:00 de la mañana se oía como azotaba los árboles; mi familia y yo nos refugiamos en una parte, donde había asegurado mi techo, pero, aun así, se mojaron nuestras cobijas, el maíz y nuestras ropas”. Recordó que llegaron unas personas con chalecos color vino a repartir unas 15 despensas, las cuales no alcanzaron y menos se les entregaron a los verdaderos damnificados; hicieron los censos, pero tampoco se les tomó en cuenta, solo a quienes simpatizan con su partido. Dónde quedó eso de su frase trillada de “primero los pobres”.
“Yo digo que está mal lo que hace el gobierno, pues manda a sus trabajadores de la ciudad, que ni conocen quién realmente necesita. Así que yo le pido que cambie esa forma de entregar apoyos”, todavía solicitó. Don Diego partió y dejó su casita así, remendada y en malas condiciones. El apoyo nunca le llegó.
López Obrador miente, no hay apoyo de medicamentos. Con el pretexto del combate a la corrupción, López Obrador cambió el Seguro Popular por el Insabi, con el que según se garantizaría el servicio de salud y medicamentos a los mexicanos. Otra mentira para el pueblo. El portal politica.expansion.mx publicó en julio de 2021: “La cobertura de los servicios de salud es menor con el Insabi. La falta de acceso a la atención médica pasó de 16.7% en 2015 a 21.5% en 2020, el primer año que operó el organismo que sustituyó al Seguro Popular, según el Coneval”. Doña María García Manzano, huitzilteca de la localidad de Taltzintan, aseguró en una entrevista: “Yo padezco diabetes y los medicamentos como la metformina no la hay, no nos la dan en la clínica, la tengo que comprar. A mucha gente se le está complicando. La verdad, muchos no se la compran, porque no les alcanza el dinero”.
López Obrador le miente al pueblo; sin embargo, el día a día que viven los mexicanos exhibe la contradicción entre la retórica charlatana de sus mañanera y la realidad.
Hace unos días, el presidente volvió a atacar al Movimiento Antorchista Nacional con la misma perorata. En repetidas ocasiones, en voz de nuestros líderes y nuestro dirigente nacional, Aquiles Córdova Morán, hemos explicado que esto es una calumnia, pues a pesar de que la Fiscalía ha investigado a nuestros compañeros dirigentes, no ha podido encontrar ninguna prueba de que nuestra organización haya recibido recursos públicos y menos que haya hecho uso indebido de estos.
López Obrador no puede comprobar sus dichos contra el Movimiento Antorchista, nos ataca porque ve a nuestra organización como un rival político; por ello y a pesar de sus mentiras, nosotros seguiremos trabajando para abrirle los ojos al pueblo mexicano, para que se de cuenta quién le miente, quién lo tiene en esa situación marginación, pues como dijo nuestro dirigente nacional, Aquiles Córdova Morán en su pronunciamiento del día jueves, el pueblo necesita a quienes “le expliquen su derecho a una vida mejor, más segura y humana, y que lo organicen para dar una lucha exitosa por ese propósito”, ya que nuestra lucha es contra la marginación y la explotación, y sobre ese camino continúamo, a pesar de la represión, a pesar de las falacias.
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