MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Covid-19 desenmascara la situación lacerante que atraviesan los oaxaqueños

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Las medidas de prevención del coronavirus o Covid-19, se han reducido a "quedarte en casa y lavarte frecuentemente las manos", sin embargo, para millones de mexicanos y en especial para los oaxaqueños, esas medidas son poco certeras o viables, debido a que si salen a trabajar no es por capricho sino por necesidad y en segundo lugar, porque como es muy conocido por muchos, cientos de familias ni si quiera pueden lavarse las manos frecuentemente no por necedad sino por falta de agua en la entidad. Esa es la realidad.

Y es que, pese a que para muchos la cuarentena significa estar en casa, casi en modo vacaciones, para otros la preocupación se eleva a cómo van sobrevivir durante los días de pandemia. Pues durante el cuarto trimestre del 2018, un total de 1.5 millones de oaxaqueños se encontraba en el empleo informal en todas modalidades lo que representaba un 80.5 por ciento de la población ocupada en la entidad, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). Ante esto, se indica que el número de personas por sus condiciones laborales, deben buscar la forma de seguir trabajando, pese a que se ha recomendado mantenerse en los hogares a causa de la pandemia. A esto se suma que 1.5 millones de oaxaqueños son considerados vulnerables porque desempeñan su trabajo sin la protección de seguridad social.

Es de señalar que, también durante el periodo antes mencionado, la tasa de condiciones críticas de ocupación también incrementó en la entidad oaxaqueña al pasar de 23.5 por ciento de personas a 25.4 por ciento. Incluyendo estas condiciones a personas que trabajan menos de 35 horas a la semana por razones ajenas, más las que trabajan más de 35 horas con ingresos que son mensuales, inferiores al salario mínimo y las que laboran más de 48 horas a la semana ganando hasta dos salarios mínimos.

Existen riesgos reales de que Oaxaca sea uno de los estados con mayor número de casos de Covid-19, ¿Por qué? Según datos médicos, el virus llega a vencer con mayor prontitud a personas mayores de edad y, de acuerdo con el Inegi, en Oaxaca había 206 mil 169 ciudadanos mayores de 60 años en 2010, lo que equivale al 10.7 por ciento de la población total. Lo que señala que este porcentaje colocó al estado en el segundo lugar nacional con mayor número de población mayor a 60 años, solo superada por la ahora Ciudad de México, con 11.3 por ciento de su población.

Ahora bien, esa es la primera realidad dura a la que nos enfrentamos los oaxaqueños, pues ahora viene a repercutir el problema del desabasto del vital líquido, donde al menos el 58.3 por ciento de la población en Oaxaca contará con la complicación de cumplir con las acciones preventivas para evitar contagiarse por el Covid-19, toda vez que crecen de agua potable en sus hogares. Porque pese a las instrucciones de la Secretaría de Salud federal y estatal recomiendan lavarse las manos varias veces durante el día, 2 millones 384 mil oaxaqueños carecen de acceso a los servicios básicos (agua potable) en su vivienda. De aquí se deduce que un ciudadano que carece de agua en su hogar debe desembolsar de 850 a mil pesos por 10 mil litros de agua, que es vendida por operadores de pipas. De acuerdo con el Consejo Nacional de Evolución de la política de Desarrollo social (Coneval), más de la mitad de la población no tiene agua potable dentro de sus viviendas.

Según información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revela que en 2.8 por ciento de los municipios de la entidad, se presenta algún grado de sequía, por ejemplo: Santiago Laollaga, Santo Domingo Petapa, Ciudad Ixtepec y Santo Domingo Ingenio pertenecientes a la región del Istmo, presentan sequía moderada, mientras que en otros 7 municipios se presenta una sequía severa, entre los que destacan: Asunción Ixtaltepec, Matías Romero, San Juan Guichicovi y Santa María Petapa.

Esto último, además de ser un problema grave, deja ver que las políticas implementadas desde el gobierno estatal hasta las municipales, son endebles y afecta las familias más humildes. El paso de la pandemia deja pues, una lección más a los oaxaqueños y mexicanos, que las políticas de los actuales gobernantes no están beneficiando a las mayorías, ejemplos hay muchos, pero en Oaxaca por ejemplo sobresalen el alto índice de empleo informal y la falta de servicios básicos. Y ante esa situación, el pueblo debe organizarse y educarse para llegar a formar un partido que realmente los represente, cuestión a la que llama el Movimiento Antorchista Nacional.

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