Creo que no debemos de olvidar los mexicanos que vivimos en una sociedad capitalista, que se mueve por el libre mercado, es decir, el respeto irrestricto a la propiedad privada, libre del intervencionismo estatal, tanto en materia de las inversiones como en la justicia social; esto, el modelo neoliberal que en el mundo y en México también nos rige, es el mismo que ha demostrado ser un fracaso porque solo nos produce pobreza para la mayoría de los mexicanos y concentración insultante de la misma para unos pocos.
Empiezo por esto porque he visto en la prensa que los analistas lanzan sus baterías contra el presidente de México, (aclaro, no lo estoy defendiendo) que algo de responsabilidad debe de tener, pero se quedan ahí, diciendo que es un mentiroso y corrupto; que es culpa de la reforma energética, otros dicen que el gasolinazo se debe a la baja del precio del petróleo en el mercado internacional, etc., etc. pero no se dice nada con relación al sistema económico, que es el verdaderamente culpable de todos nuestros males.
Ya sabemos que somos productores de petróleo, que lo exportamos crudo y que lo compramos refinado, ya como gasolina porque PEMEX no lo puede refinar aquí en México, cuando menos un porcentaje muy alto, y nos vemos obligados a seguir trabajando de esta manera. Es decir, producimos la materia prima, el petróleo lo exportamos a los Estados Unidos y luego ellos, los americanos nos lo venden como gasolina pero ya muy cara, y aun así, se sabe que somos el país que más gasolina le compra a nuestro vecino del norte.
Cuál es el problema, por qué si somos ricos en petróleo nos aumentan la gasolina y causa mucha molestia en el pueblo. Aquí encuentro que no podemos producir gasolina porque no tenemos la tecnología necesaria para producirla y porque el gobierno que tenemos no es el representante de las mayorías, y en segundo lugar, porque a los que les compramos la gasolina nunca estarán de acuerdo en que nosotros nos superemos como nación. Recordemos cómo se trata a los países como Siria, Libia, Rusia, etc., con guerras, bloqueos y sanciones económicas porque no se alinean a la política de sometimiento de EU. Pues bien, a donde quiero ir es a que muy probablemente se esté obligando al gobierno mexicano para que PEMEX no sea ya de los mexicanos, para que la privaticen o para que de plano quede muy debilitada y deje de ser una competencia seria para las empresas extranjeras (americanas) que entrarán a vender este producto.
Es en este problema donde nuestros analistas se atoran, y se atoran no porque no piensen sino porque los intereses que ellos representan no ofrecen algo diferente a los mexicanos sino más de lo mismo como lo que busca López obrador. El problema no es sencillo, el problema se vuelve de suma importancia porque se trata de ofrecer una alternativa diferente y viable para que el país salga de la pobreza y enfrente los problemas económicos tomando en cuenta en primero lugar el bienestar de las mayorías. Sólo puede tener éxito un proyecto que tenga el respaldo de las masas empobrecidas porque son estas las más afectadas ahorita con la política económica de saqueo de nuestros recursos naturales como lo estamos viendo con el petróleo y solo ellas mirarán como suya una política económica que enfrente con dignidad los retos y desafíos que presenta el sistema económico mundial.
Y es en esta explicación como debemos de ubicar las manifestaciones de descontento contra el alza a la gasolina, que sin lugar a dudas viene a ser otro golpe más a los ya de por sí apaleados mexicanos. Es correcto que el pueblo proteste, que levante la cabeza porque sólo así será escuchado, pero debe de ver quién realmente lo representa, MORENA no es la salvación de la patria, MORENA es sólo uno de los últimos instrumentos de que se valen las élites poderosas de México y tal vez del extranjero para que sigamos siendo un país productor de materias primas. López Obrador no dice cómo le hará para que el pueblo salga de la pobreza ni cómo piensa hacerle para enfrentar los problemas económicos que se le dictan al país desde el extranjero. Si no lo dice es porque no lo sabe o porque realmente hará lo que le dicten los poderosos y por eso, no se abre plenamente ante la nación. Por eso, es importante dar a conocer ahora a la opinión pública nacional, que el Movimiento Antorchista Nacional viene trabajando al lado de los más pobres desde hace más de cuatro décadas y desde entonces, hemos planteado de que sí es posible cambiar este país siempre y cuando sea el pueblo el que dirija los destinos de la nación y no los partidos políticos actuales que solo defienden los intereses de los poderosos.
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