El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en su Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2022, informó que la cantidad de mexicanos pobres pasó de 51.9 millones a 55.7 millones entre 2018 y 2020, o del 41.9 al 43.9 por ciento del total de la población. Dentro de esta población, se identificó que la población en situación de pobreza extrema fue la que aumentó en mayor medida, al pasar de 7 por ciento, 8.7 millones de personas en 2018 a 8.5 por ciento, 10.8 millones en 2020, es decir, 2.1 millones más de pobres entre los pobres.
Para tener una idea más precisa de lo que reflejan estas cifras oficiales revisemos la clasificación del Coneval. El organismo, considera que una persona se encuentra en situación de pobreza extrema cuando tiene tres o más carencias, de seis posibles, dentro del Índice de Privación Social y que, además, se encuentra por debajo de la línea de bienestar mínimo. Las personas en esta situación disponen de un ingreso tan bajo que, aun si lo dedicase por completo a la adquisición de alimentos, no podría adquirir los nutrientes necesarios para tener una vida sana.
Todos sabemos que los morenistas consecuentes con su jefe e ideólogo Andrés Manuel López Obrador, en ningún minuto pueden ni podrán dejar de culpar a los gobiernos anteriores de todas las calamidades que sufre y seguirá sufriendo el pueblo de México, sin embargo, el Coneval registró que entre 2012 y 2014 hubo una reducción de 100 mil personas en situación de pobreza. Lo que hizo que el número de la población en esta condición se redujera, aunque sea en una cifra muy pequeña, fue por efecto de los programas sociales del gobierno anterior, principalmente por la Cruzada contra el Hambre.
A todos nos queda claro que las acciones para combatir la pobreza que impulsaron los gobiernos anteriores, a los que López Obrador y sus incondicionales dicen tanto odiar por ser neoliberales, no fueron suficientes pues, aunque disminuyó levemente la pobreza extrema, de todos modos, siguió aumentando el número de mexicanos con alguna carencia. Pero, el impresionante aumento de la pobreza extrema en estos últimos años está claro que es resultado de la estrategia política de AMLO.
Debemos recordar que a principios del presente año. el mandatario dijo en una de sus mañaneras que “ayudar a los pobres es parte de su estrategia política, porque ellos regresan el apoyo respaldando a la Cuarta Transformación”. Pero no basta esta afirmación, es necesario darnos cuenta de que sus programas sociales son más ineficaces que antes.
El Coneval advirtió que, en los últimos años, las transferencias monetarias del Gobierno federal han perdido progresividad, las transferencias que se otorgan a través de los programas de bienestar federales redujeron su representatividad como parte de los ingresos de la población más pobre, al mismo tiempo que aumentaron entre los sectores más ricos.
Los datos del organismo especializado en la medición de la pobreza señalan que, en 2018, los apoyos monetarios que se otorgan a través de los programas del bienestar representaban el 65 por ciento del ingreso monetario per cápita por transferencias del sector más pobres. Mientras que para los de más ingresos este tipo de recursos representaron apenas el 0.7 por ciento.
En 2020, la proporción del ingreso por programas federales de desarrollo social reportó una disminución para la población con menores ingresos al ubicarse en 52.7 por ciento, en tanto que para los de mayores ingresos representó un incremento, al situarse en 3.2 por ciento.
El reporte advierte que, al considerar los ingresos totales, es decir, no sólo las transferencias sino los que se obtienen por el trabajo y la propiedad o el capital, también se muestra una reducción en la participación de las transferencias monetarias federales en los sectores más pobres.
Morena y AMLO están repartiendo dinero con el fin de manipular, pero es una operación social falsa y dañina, pues está dejando al país sin medicina, obra pública, escuelas, sin guarderías, así no se reparte la riqueza, porque los morenistas lo hacen a costa de que la economía no crezca y debido a esta política no hay empleos ni mejoran los salarios.
En este contexto, las medidas clientelares de la 4T de entregar dinero son una herramienta para incrementar el número de pobres no para acabar con la pobreza, es comprar la conciencia de los mexicanos, son programas electoreros. Con esto se confirma que el aumento de la pobreza extrema es resultado de la estrategia política de AMLO.
Frente a esta realidad, los millones de electores que votaron por Morena pensando en que les iba ir mejor con este gobierno, deben entender que la alternativa para salir de la crisis no puede estar en volver al pasado, ni mucho en que siga gobernando la 4T en nuestro país.
El pueblo pobre de México debe organizarse, educarse y tomar el poder de la nación en sus manos para cambiar la forma en que se reparte la riqueza y modificar el modelo económico neoliberal, la expresión más brutal del sistema capitalista, que está en crisis y agudiza los problemas de nuestra patria y del mundo. Esta es la tarea que la historia le tiene asignada, a los que producen directamente con sus manos la riqueza de este país.
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