Culiacán, Sin. Desde hace más de una década, cerca de 800 familias luchan contra la falta de servicios en su colonia, bautizada de manera informal como Ampliación 5 de Febrero, al oriente de Culiacán, un asentamiento que ha representado un calvario para conseguir los servicios básicos como drenaje sanitario, agua potable, luz eléctrica y pavimentación de calles.
El argumento de las autoridades es que al ser predios irregulares no les pueden introducir los servicios públicos, y a pesar reuniones de trabajo, negociaciones con funcionarios y dueños de los terrenos, no hay avances, sólo negligencia y abandono.
Madres de familia, aseguran que al conectarse a los servicios de la colonia vecina tienen que pagar hasta los 6 mil pesos para obtener agua y energía eléctrica, una carga económica para familias de escasos recursos que viven al día.
En Culiacán son decenas de colonias, las que requieren de apoyos en servicios públicos, así como la regularización para otras, que no cuentan con ni uno solo. Son alrededor de 6 mil familias las que se ven afectadas directamente en las colonias que no están regularizadas en la capital del estado, por lo que en caso de lograr una regularización serán un aproximado de 10 mil familias indirectamente las que se verían beneficiadas.
En la Capital del Bienestar, como ahora la denominan las autoridades, continúa existiendo un rezago de obras y servicios públicos debido a que se han enfocado a destinar recursos en programas sociales que no resuelven las necesidades apremiantes de las familias. Inseguridad, pobreza, insalubridad, y desempleo son la otra cara de Culiacán gobernada por Morena.
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