[…] Cantamos porque el niño y porque todo
y porque algún futuro y porque el pueblo
cantamos porque los sobrevivientes
y nuestros muertos quieren que cantemos. […]
Coincidiremos si afirmamos que 2020 fue un año terrible para la inmensa mayoría de los mexicanos, pero también muy aleccionador porque el pueblo de México, puede ahora identificar más fácilmente quiénes son sus verdugos, esos lobos vestidos de corderos, como la Morena.
Ojalá que esta situación tan deprimente que vivimos nos permita reflexionar acerca de lo que ocurre en nuestro país, estamos padeciendo una terrible crisis económica y sanitaria, somos 130 millones de habitantes y al momento de escribir estas líneas tenemos un millón 571 mil 901 contagiados y 136 mil 917 defunciones por covid-19.
Según estimaciones del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED) de la UNAM, debido a las medidas sanitarias contra el coronavirus en México hay 11 millones de personas más en situación de pobreza extrema, al pasar de 22 a 33 millones de personas en junio pasado. Se considera en pobreza extrema a las personas que no pueden alimentarse de manera suficiente, no tienen una casa donde dormir, no estudian y tampoco reciben atención médica.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2019, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en nuestro país hay 28.5 millones de personas entre 5 y 17 años, de las cuales hay 2.2 millones trabajando (7.5 por ciento). El incremento acelerado de la pobreza en nuestro país ha ocasionado que niños y jóvenes abandonen las escuelas y trabajen para ayudar económicamente en los gastos de alimentación. Esto es una ayuda para las familias, pero al mismo tiempo se está convirtiendo en un peligro, porque los niños, adolescentes y jóvenes al ver en sus manos un poco de dinero, algunos de ellos lo usan para quedar atrapados en el terrible mundo de las drogas.
A los largo de los años he sido testigo de la terrible descomposición física y mental que sufren los jóvenes con adicciones como alcoholismo o drogadicción, se podrían escribir libros completos de personas que antes de ser adictos trabajaban o estudiaban y, pasado el tiempo, se convierten en un problema para la familia que debe pagar las multas por las infracciones que cometen, cuando son detenidos por cometer algún delito, visitarlos en las cárceles o cuando quedan tan afectados que no son capaces de trabajar para cubrir sus gastos mínimos, por lo que tienen que mantener de por vida.
Y por increíble que parezca, en el estado de Michoacán, no es posible hacer justicia y brindar a nuestros niños y jóvenes más espacios deportivos, para que tengan alternativas diferentes para lograr su transformación y transformar así nuestra tan desangrada patria.
Un par de vivales, Aidé Yépez Rangel y Manuel Rodríguez Valencia, quieren apropiarse de un terreno en el cerro del Quinceo de la capital michoacana, con la intención de fraccionarlo y venderlo, robando a quienes les den dinero, al no saber que ese terreno, en el año 2000 fue entregado en comodato al Movimiento Antorchista para la construcción de una Unidad Deportiva.
A pesar de que van varias semanas que el Comité Estatal de Movimiento Antorchista en Michoacán, ha dialogado permanentemente con el secretario de gobierno, el licenciado Armando Hurtado Arévalo, quien se comprometió a evitar la consumación del atraco y actuar en consecuencia. En lugar de actuar, el pasado 14 de enero a las 14:00 h. un grupo de sicarios atacó con machetes a los antorchistas que resguardan el predio invadido por los vivales ya mencionados, es evidente que les estorba que estén los antorchistas en el predio porque no les permite vender a su antojo los lotes como tenían planeado. Cabe preguntarse ¿son tan poderosos Aidé Yépez Rangel y Manuel Rodríguez Valencia, que el gobernador no puede detenerlos? ¿Por qué el gobernador no puede dar órdenes para que se haga justicia y salgan definitivamente del terreno esos malandrines? ¿Así es como se cuida que niños y jóvenes tengan espacios deportivos para tener una mejor calidad de vida? ¿Qué está esperando el gobernador para actuar?
"Cantamos porque el sol nos reconoce
y porque el campo huele a primavera
y porque en este tallo en aquel fruto
cada pregunta tiene su respuesta”.
Los hemos dicho fuerte y quedito, el Movimiento Antorchista es el pueblo organizado, consciente, conocedor de sus derechos, al que no lo pueden engañar tan fácilmente, si el gobernador verdaderamente está preocupado por su gente, es su responsabilidad poner orden en el asunto y no permitir que sigan las injusticias.
Los antorchistas hemos demostrado sobradamente que nos interesa el bienestar de la población, por eso hacemos torneos nacionales de basquetbol, voleibol, futbol, natación, ciclismo, entre otros, como una manera de mostrar al niño y al joven que los pobres sí tenemos derecho a la recreación y a disfrutar de una patria mejor y más justa.
Hemos gestionado la construcción de unidades deportivas en todo el país con inversiones importantes, como la Unidad Deportiva "La Antorcha&rdquo, a un lado de la terminal de autobuses, en Morelia, con canchas de basquetbol techadas, canchas de futbol con pasto sintético, pista de tartán y alberca.
Seguiremos denunciando, con los medios que tenemos a nuestro alcance las injusticias como la que ahora se comete y desafortunadamente permite el gobernador.
¡Unidos, conscientes y organizados, lograremos tener una patria donde los niños, adolescentes y jóvenes tengan espacios de recreación!
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