Pocos son los mexicanos para los que esta pandemia de la covid-19 no signifique una tragedia; hay familias que prácticamente han desaparecido a raíz de la desolación y muerte que ha traído consigo no la pandemia, sino el manejo criminal que el Gobierno de la 4T ha hecho. Para muestra, las estadísticas. México no se halla entre los países con mayor número de casos identificados; en el ranking mundial ocupa el lugar número 15º. Según las estadísticas reportadas por el gobierno mexicano hasta hace unos cuantos días (4 de noviembre de 2021) se habían confirmado 3.8 millones de casos de covid-19; esto es, por cada 100 mexicanos, tres fueron diagnosticados con esta enfermedad. En contraste, este porcentaje alcanzó hasta 14% de la población total en Estados Unidos o el Reino Unido. Y a pesar de la baja tasa de contagio, México es el cuarto país más afectado en términos de fallecidos a causa de la covid-19. Según las cifras oficiales ha habido 288 mil muertos a causa directa del coronavirus; esto es 8 de cada 100 contagiados terminó falleciendo. La mayor tasa de letalidad en todo el mundo. La estadística muestra que esta letalidad se incrementa en los estratos más marginados: en los deciles de ingreso dos y tres (trabajadores asalariados urbanos, en general, que perciben hasta 1.5 salarios mínimos) la tasa de letalidad fue superior al 20%.
Como se ha señalado, la gran difusión de otras enfermedades como la diabetes, la hipertensión o la obesidad de la población mexicana espoleó la estela de muerte que esta pandemia ha ido sembrando en México. Otra explicación de este resultado es que el sistema de salud, precarizado por los gobiernos previos, estaba desorganizado a causa de la reorganización promovida por la 4T. Pero según el análisis del estudio “La respuesta de México Covid-19. Un caso de estudio” firmado por la Organización Mundial de Salud concluyó que en México se pudieron haber evitado 190 mil muertes (provocadas directa o indirectamente por la covid-19) si se hubiera gestionado de mejor manera la pandemia.
Un estudio reciente sintetiza el impacto de la pandemia en términos de los años en que se reduce la esperanza de vida. En México, la esperanza de vida al nacer se ha reducido tres años en promedio; la de los hombres se redujo en 3.6 años y la de las mujeres, en 2.5 años. La esperanza de vida es el promedio de los años que se espera que una persona viva. Es un indicador que valora en general las condiciones de vida que tiene la población en un momento dado. Su reducción da cuenta de que estas condiciones han empeorado.
En suma, los estragos de la pandemia de la covid-19 en México no se le puede achacar únicamente al virus, sino también a la negligente gestión que se hizo de ella que provocó que se magnificaran. El nefasto manejo de la pandemia por la 4T, tiene un efecto sobre el bienestar de la población que permanecerá más allá de la duración de la misma pandemia. Pero todavía más, estos efectos se concentran en la población de menores ingresos de los centros urbanos; sobre los que se cebará la contracción de la economía. La 4T se muestra ya triunfante sobre la covid-19. Esa es una lectura mentirosa. Los que seguimos aquí, no olvidemos las lecciones de la Pandemia.
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