Marx escribió en el Manifiesto Comunista de 1848: "Toda la historia de la sociedad humana, hasta la actualidad, es una historia de luchas de clases. Libres y esclavos, patricios y plebeyos, barones y siervos de la gleba, maestros y oficiales; en una palabra, opresores y oprimidos, frente a frente siempre, empeñados en una lucha ininterrumpida, velada unas veces, y otras franca y abierta, en una lucha que conduce en cada etapa a la transformación revolucionaria de todo el régimen social o al exterminio de ambas clases beligerantes."

Entendida así la historia desde el enfoque del materialismo histórico por quienes se dicen de izquierda es fundamental, ya que nos permite entender que después de desaparecer el comunismo primitivo ha existido una lucha entre quienes tienen y los que no tienen, entre opresores y oprimidos que ha permitido el nacimiento, desarrollo y muerte de los modos de producción conocidos por la humanidad. Por tanto, todos los cambios histórico-culturales que se producen en la historia se deben a las condiciones materiales de la vida y la propia lucha de clases. Para llegar a esta conclusión es fundamental tratar a la historia como una ciencia y apoyarse del método científico para descubrir las leyes que rigen y explican el desarrollo social.

Era necesaria esta pequeña introducción para entender a quienes hoy escriben la historia de México. Ya que el 13 de enero del presente año la Secretaría de Educación Pública de México (SEP) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presentaron el libro de historia “México, grandeza y diversidad” dirigido a alumnos y maestros de secundaria. En el mencionado libro se hace un apartado en el capitulo XX que denomina “Una nueva esperanza” de la autoría del español naturalizado mexicano Armando Bartra, catedrático de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).

En dicho capítulo se hace alusión a la noche del 01 de julio de 2018, describe con júbilo diversas historias y el festejo de jóvenes y ancianos por la caída del viejo régimen totalitario. Asimismo, hace extractos del mensaje de AMLO donde acusa al movimiento feminista, derechos humanos, movimiento obrero, campesino y a todos los movimientos que mantenían al régimen autoritario. Para ello, invoca a los gobiernos postrevolucionarios como cómplices del sistema económico explotador a excepción de Lázaro Cárdenas del Río, ya que para Armando Bartra, AMLO es la encarnación del mejor presidente de México.

El autor justifica que el primero de julio es el inicio de la Cuarta Transformación. Para ello, hace un recuento justificativo que llama “Crisis Moral” (1968) con el movimiento estudiantil del 68´, la Crisis Social de 1970-1988 con el apogeo de los diversos movimientos sociales y la Crisis del modelo de desarrollo de 1988-2018, periodo en el que menciona la lucha por el poder que lleva a la fractura política del PRI y el Frente Democrático Nacional (FDN) encabezado por Cuauhtémoc Cárdenas y por ende la famosa “Caída del Sistema de 1988”.

Este recuento general que hace Armando Bartra hace una crítica al modelo neoliberal y a los tratados de libre comercio como el TLCAN que encabezó Carlos Salinas de Gortari y sus tecnócratas que llevaron a la bancarrota al país. Asimismo, justifica que en el periodo de 1988-2018 se vivió una crisis del sistema electoral para robarles el triunfo en tres ocasiones.

Armando Bartra remarca en su obra el fin del neoliberalismo por decreto del presidente, el combate a la corrupción, las obras insignia del presidente y el reparto de dinero bajo el esquema de transferencias monetarias directas y justifica los procesos de transformación que ha sufrido el país de acuerdo a su visión (en realidad, la visión de Morena) bajo el siguiente esquema: La primera transformación separar a México de España con Miguel Hidalgo (pág. 441); la segunda transformación separar a la iglesia del estado con Benito Juárez (pág. 446); la tercera transformación separar al poder político del económico para que prevaleciera la democracia con Francisco I. Madero (pág. 450) y la Cuarta Transformación consiste en separar una vez más el poder político del económico con AMLO (pág. 455).

Con esta reseña general se puede ver lo absurdo que es la tercera y cuarta transformación que plantea el autor en su obra. La comparación de Lázaro Cárdenas y López Obrador, los ataques a los movimientos sociales acusados de corporativistas, el fin del neoliberalismo decretado por el presidente y la separación del poder político del económico; sentenciar como un éxito las obras y acciones del presidente de la República sin analizar en los hechos la economía, empleo, salud, educación y seguridad a la llegada de la cuarta transformación. Sin embargo, todo el Capítulo XX está plagado de “muletillas refritas” de Andrés Manuel López Obrador, saturada de inconsistencias y con verdades a medias que no justifica una verdadera transformación para nuestro país.

Es evidente que la obra antepone la ideología de Morena y sus teorías conspirativas y rehúye a las teorías que explican el desarrollo de los fenómenos sociales y económicos que señalan la realidad de nuestro país. Para Morena es más fácil dar explicaciones que apoyarse en el método científico, no analiza los hechos partiendo de la lucha de clases que demuestren los resultados de su gobierno. Atacan a los gobiernos pasados para que no se cuestione el gobierno actual. Por ejemplo: acusan al gobierno del PRI que les robó la elección de 1988 con la “caída del sistema”, pero no dicen que quien “tumbó” ese sistema es el actual director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett. También, ha decretado el fin del neoliberalismo y la separación del poder económico del poder político, pero la sociedad se cuestiona ¿por qué desayuna Andrés Manuel López Obrador con Carlos Slim y Ricardo Salinas Pliego en Palacio Nacional? ¿Se habrán vuelto hermanos de la caridad los hombres más ricos de México? Carlos Slim amasa una fortuna de 68.8 mil millones de dólares y Ricardo Salinas Pliego 12.9 mil millones de dólares, el segundo ha levantado la mano para comprar Citibanamex ahora que huye de México ante la evidente crisis que azotará al país.

Así está compuesta la obra de Armando Bartra, un documento basado en dichos y no en hechos fehacientes, carente de un método y por tanto anticientífico. Es un documento ideológico que están difundiendo las instituciones publicas como la SEP y el INAH, cuyo funcionamiento se sostiene del erario público, producto de los impuestos de los mexicanos que es utilizado para atacar a organismos independientes como el INE y a los movimientos sociales que contradicen los dichos del presidente. El gobierno quiere disfrazar como obras de historia la difusión de su ideología.

El libro “México, grandeza y diversidad” es un documento muy valioso en sus primeros capítulos por el rigor teórico y científico que ayudan al entendimiento de la historia de México; sin embargo, el último capitulo es un vulgar panfleto producto de la ideología morenista que fue introducido a ultranza para consagrar al presidente y su partido como los herederos de la revolución, cuando son justamente lo contrario; son los actuales sirvientes de la burguesía nacional y viven el mejor momento de maridaje que permite satisfacer sus apetitos más perversos.

Al final, cualquier escrito hecho y difundido por las instituciones públicas no dejará de ser la historia oficial, la historia que dicta y difunde la ideología de la clase dominante. En México, el poder político y económico lo tiene Morena y seguirá haciendo uso faccioso de las instituciones para atacar a quienes piensen diferente con el fin de perpetuarse en el poder. Esto se debe a que representan los intereses de los poderosos de México. Si se quiere cambiar la situación, se debe organizar y educar políticamente al pueblo mexicano y entender lo que Marx escribió en 1848. Que conste.