Han pasado las elecciones y algunos festejan y otros, aunque inconformes, han aceptado los resultados de la mayoría de los pueblos mixtecos a pesar de que en varios municipios se vio intervención directa de programas sociales con claros fines electorales, lo que sirvió para inclinar la balanza en favor del partido oficial (Morena) y, por lo tanto, hay acusaciones de una elección de Estado, por desgracia, quienes acusaron hasta ahí quedaron: en la pura acusación.
Los perdedores se han apagado y seguramente su amor a la región resurgirá en tres años, cuando nuevamente se acerquen las elecciones para los diferentes puestos de elección popular.
De entre todas las expresiones políticas, destaca el Movimiento Antorchista, aquella que con cargos o sin cargos municipales se dedica de manera permanente a la gestión de obras y servicios para todos los pueblos, pues dentro de la organización se ha entendido que la mejor manera de abatir la pobreza es a través del desarrollo de los pueblos mediante la obra pública. Nada mejor que los testimonios de la gente de los pueblos para dar constancia de la importante labor que hace a diario el Movimiento Antorchista.
Don José Nava, plenista de Guadalupe Victoria, en Tulcingo de Valle, reconoce el trabajo de Antorcha en la comunidad, pero a la vez se muestra preocupado, con incertidumbre acerca del desarrollo de los pueblos.
Mire usted, me dice, ahora tenemos calles pavimentadas, banquetas y hasta un bachillerato para los muchachos. Nadie había hecho algo por el pueblo hasta que llegó Antorcha, por eso mis paisanos están contentos, pero también nos preocupa que ahora que el partido del gobernador ganó nos van a negar las obras. Ellos vinieron a prometernos arreglar el camino y no lo han hecho, en estas temporadas de lluvia ya ve usted como está difícil entrar al pueblo, lo más seguro es que no lo hagan y nos dejen engañados como le hacen siempre.
El habitante, quien es firme creyente de la lucha organizada y quien ha visto a sus ojos el progreso que Antorcha lleva a los municipios, continuó su relato: “por eso mi familia y yo estamos en Antorcha porque buscamos obras para nuestro pueblo, las obras que hay son gracias a la organización”.
Como don José hay varios campesinos que confían en el trabajo del Movimiento Antorchista, han sido disciplinados políticamente y leen semanalmente los artículos de su dirigente, el estudio los ha convertido en personas analíticas, pues conocen la realidad en que viven y saben que organizarse es el único camino para salir adelante.
Guadalupe Victoria es solo un ejemplo, en todos los pueblos Mixtecos hace falta obra pública y en tanto no haya garantía de desarrollo por parte de los gobiernos, los campesinos están decididos a seguir organizados y a invitar a otros paisanos. Aquí, Antorcha nos ha enseñado a trabajar en equipo, sabemos que si nos organizamos podemos lograr más obras. Por eso seguimos invitando a más paisanos para que entre todos logremos mejorar el pueblo.
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