San Luis Potosí.- Con motivo del XVI Encuentro Nacional de Teatro y XI de Pintura, se presentó en el Teatro de La Paz la obra titulada Las Brujas de Salem de Arthur Miller, quien escribió esta obra en cuatro actos en 1953, mientras el senador estadounidense Joseph McCarthy promovía una persecución hacia funcionarios de gobierno, sindicalistas, militares y miembros de los medios de comunicación e industria del cine, sospechosos de colaborar o espiar para el bloque comunista, así lo comunicó la directora de la obra Vania Mejía.
La obra fue representada por la compañía teatral antorchista de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Metropolitano, "escrita por Arthur Miller, uno de los grandes dramaturgos de nuestro siglo, ha pasado a ser una obra cumbre indiscutible de la literatura contemporánea".
"Utilizando los juicios de Salem realizados en 1692 como escenario para la acción dramática, Miller reflejaría con ello, la denominada "caza de brujas" que sufrió junto con otros importantes escritores, guionistas, actores y directores de la talla de Charles Chaplin y Frank Capra, denunciados por sus propios colaboradores y colegas, para salvarse de ir a la cárcel o perder sus empleos", dijo Mejía.
Las Brujas de Salem es una obra basada en una historia real, lo que demuestra lo ignorante que puede llegar a ser el ser humano. La historia básicamente narra como un grupo de jovencitas, lideradas por Abigail, desata el caos en una humilde aldea de puritanos, donde el fanatismo religioso llegaba a limites extremos al señalar con el dedo a quienes practicaban la brujería, sobre todo a las mujeres.
El primer acto inició con un grupo de niñas bailando en el bosque, después en una austera habitación típica de los devotos puritanos, perteneciente a Betty Parris, una niña, quien desde la noche anterior estuvo inmóvil, sin reacciones, y su padre, pastor de la aldea, rezaba de rodillas junto a la cama de su hija.
"Abigail Williams también se encontraba en la habitación; una muchacha huérfana de 17 años adoptada por el reverendo tras el asesinato de sus padres a manos de los indios. Ella fue la principal responsable de desatar, no solo la histeria colectiva del pueblo, sino que peor aún, la muerte de decenas de personas y el conducto para venganzas y ambiciones ocultas, es así como se desarrolla esta historia".
Por otra parte los asistentes comentaron respecto a esta obra, "desde la primera escena con las jovencitas del pueblo bailando a escondidas en un bosque a mitad de la noche, hasta su impactante final, fue absolutamente imposible levantarse del asiento, desde que empieza hasta que termina. Magnifico, no hay otro calificativo mejor".
"Tanto Betty como Abigail y Títuba se dejaron llevar por el temor y el castigo de aquel acto tan contrario a las estrictas normas de la sociedad religiosa caracterizada por una fuerte vigilancia de unos con otros en cuanto al comportamiento devoto".
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