En ocasión anterior he opinado acerca de la rifa del avión presidencial y lo que significa este fraude gubernamental a cargo del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien ante el pueblo de México sigue presumiendo de austero y de querer acabar con la corrupción, pero en los más de tres años que lleva en el cargo ha sido el gran derrochador de recursos públicos aportados con los impuestos de las mayorías.
Quiero referirme en primer lugar a la rifa del avión presidencial un Boeing 787 Dreamliner que AMLO propuso en venta pero que nadie se animó a comprar; se argumentó tener exceso de lujos y ser señalado como símbolo de los abusos de la clase gobernante proveniente de los corruptos del pasado cuyo costo fue de 218 millones de dólares.
Así que nadie hizo suyo este aparato y entonces el mandatario tuvo la genial idea de rifarlo (lo que en su momento generó miles de memes y burlas entre usuarios de redes sociales), a través de la venta de cachitos de acuerdo con la Lotería Nacional (LOTENAL), sin embargo, el afortunado de la rifa no se ganaría el avión, sino que sería acreedor de uno de los cien premios de 20 millones de pesos, por lo que con esta acción se perdía el objetivo primordial que era deshacerse de la malquerida aeronave.
El mandatario también decidió que instituciones de salud deberían comprar boletos para colaborar con el propósito y a la vez tuvieran la posibilidad de quedarse con alguno de los premios, luego se dio a conocer que 13 hospitales ganaron 20 millones de pesos. El ISSSTE de Fresnillo, Zacatecas fue uno de los afortunados con el número 1,285,450 pero tuvo que gastar unos 5 millones de pesos en mil 51 billetes dejando de atender otras prioridades por estar obligados a corresponder a la estrategia pero hasta la fecha no se entrega el premio provocando mayor desconfianza en los proyectos de Morena. La denuncia fue hecha por el alcalde morenista de Fresnillo, Lic. Saúl Monreal Ávila respecto a que no se entregaba el premio, reclamo centrado en Verónica Díaz, Delegada de los Programas del Bienestar en Zacatecas evidenciando el incumplimiento en la rifa de un no avión, así el enredo.
Esta semana se retomó el tema en medios informativos nacionales dado que el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), exigió a LOTENAL que se aclare la información para saber cómo se usaron los 2 mil millones de pesos en los billetes del Gran Sorteo Especial 235 referente a esta rifa del 15 de septiembre del 2020.
Y lo más curioso es que la exigencia del INAI recae nada menos que en el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado, institución que debe fungir como otro mecanismo del gobierno para evitar la opacidad, así como en prevenir más fraudes y corrupción. Bien por el INAI, con esta acción que pretende clarificar los recursos millonarios, sin embargo, se omite intencionalmente la otra parte del problema que muchos mexicanos desearíamos saber y que también resultaría favorable para el pueblo bueno y sabio que aún tiene fe en AMLO. ¿Dónde quedaron los premios, por qué no se entregan?
Como sabemos, la lucha anticorrupción y la austeridad republicana son dos conceptos que López Obrador logró posicionar para usarlos a su favor y con ello justificar la persecución contra sus opositores, pero también para esconder los malos manejos de su gobierno que ha involucrado no sólo a integrantes de su gabinete sino a la mayoría de sus familiares que demuestran la falsedad de su discurso con los hechos, tanto a título individual pero también como jefe del ejecutivo.
Sin embargo con esta y otras iniciativas de AMLO se afecta a los ciudadanos porque en el mejor de los casos se distraen recursos públicos (dinero y bienes) y que aunque hay reiterados señalamientos por la rifa nada ha variado en la estrategia del morenista que sigue con sus caprichos, tal como el ejercicio de revocación de mandato donde se gastarán de 1,567.4 millones de pesos en una acción innecesaria porque quienes lo eligieron lo hicieron por el sexenio y quienes optaron por otra opción solo esperan que pronto termine este circo.
Los mexicanos no podemos permanecer indiferentes ante actos fraudulentos, innecesarios y cómicos que salen muy caros al país, en consecuencia debemos denunciar que la 4T no actúa con honestidad ya que juega con la inteligencia de los mexicanos tal como el enredo del avión presidencial que sigue estando guardado y no se dice si será vendido al menos como chatarra.
En los hechos AMLO demuestra que la lucha anticorrupción, la honestidad, la austeridad republicana y el “primero los pobres”, son frases de la narrativa con que se conduce para engañar, siendo este un gobierno descaradamente más tramposo, peor que los del pasado.
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