MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

El deseo y la moral según Descartes (II/II)

image

Una de las máximas cartesianas es que los sentidos nos engañan, y dado que nuestros deseos están fundados en nuestros sentidos, tendríamos que dudar también de la certeza de nuestros deseos, ¿por qué no podríamos esperar que nuestros deseos también nos engañen? La única manera de salvarnos de esta ignorancia está propuesta en la segunda máxima de su moral provisional: ser tan resuelto como sea posible y estar en acción constantemente una vez que se ha tomado una decisión, incluso si ésta tiene fundamentos cuestionables, incluso estando ciertos de que nunca tendremos una verdad definitiva, pues “nuestra virtud es la firmeza de esa resolución.” 

La moral provisional es la base para construir un nuevo método del conocimiento, que implicará un contento particular y general.

En un primer momento podemos creer que hemos llegado o que podemos llegar a un conocimiento claro y distinto del bien, sin embargo, si así fuera, “éste conferiría orden a nuestra acción. Como carecemos de este conocimiento sólo la firme determinación de la voluntad para ser constante puede crear el orden.” Tras estas características, a partir de nuestra reflexión para elegir lo que nos parezca claro y distinto, no tendremos remordimientos ni nada que reprocharnos. La moral provisional es necesaria para vivir mientras se construye un método nuevo que sí busca verdades, al encontrar verdades podremos juzgar bien, y al juzgar bien, obrar bien. 

El obrar bien, pues, está precedido necesariamente por un buen juicio. Para Descartes el sentido común está repartido equitativamente pero esto no debe alegrarnos de modo tan sencillo, pues también tiene un lado trágico: no todos lo utilizan de la misma forma, contribuye a que la vida de cada ser humano se bifurque en tantos puntos y a que se yerre con frecuencia. 

Los juicios que hagamos deben partir de nuestra historia, de la reflexión que hagamos acerca de cada camino que podemos tomar: se debe “aplicar bien el sentido común, identificar camino 

seguro –sin importar que sea el más largo- para moverse en el mundo, constituye, pues, la indicación de una tarea, pero comprende a la vez un juicio histórico.” Aquí cobra sentido lo que expone al principio este texto: no hay una exclusión histórica pese a que el texto cartesiano es metafísico. La provisionalidad práctica incluye una profunda reflexión subjetiva, “la experiencia histórica no cierra, sino que abre el camino a un discurso sobre el ser.” La experiencia histórica demuestra que se requiere un nuevo método, una nueva reflexión. 

La participación en el mundo nos obliga a separarnos de él para contemplarlo y corregirlo al crear nuevos juicios. “Descartes apreció el error en el enfoque tradicional del conocimiento (…), para la construcción de un verdadero conocimiento era indispensable partir del rechazo “de todas las opiniones recibidas anteriormente””. El pensador racionalista decidió aplicar su método para refutar todo aquel conocimiento que no estaba sustentado en la razón, partiendo de su primera verdad descubierta: cogito ergo sum (el ser humano es una realidad pensante).

Sin embargo, el escepticismo puede brindarnos beneficios. Nos libera de errores pasados pero nos aísla para repensar las cosas y quizá reconstruirlas. Descartes afirma que no podremos saber todas las verdades pero hay algunas que no deben escaparse de nosotros, como la existencia de Dios, la inmortalidad del alma, que nos llevan al respeto de la infinitud divina. Pero no debemos contentarnos sólo con conocerlas, sino vivir con ellas, tenerlas presentes siempre en el espíritu, estar imbuidos e imbuidas de ellas.

Una vez reconocido todo este planteamiento, debemos tener en cuenta que cada uno de nosotros es una persona separada de los demás, y, cuyos intereses son, por consiguiente, distintos de los del resto del mundo, en cierto modo; sin embargo, uno debe pensar que no podría subsistir solo y que es, de hecho, una de las partes del universo y, más especialmente aún, de esta tierra, una de las partes de este Estado, de esta sociedad, de esta familia, a que está unido por su casa, su juramento, su nacimiento. (René Descartes, Cartas filosóficas, XXIV).

La moral provisional es la base para construir un nuevo método del conocimiento, que implicará un contento particular y general (de nuestro espíritu y del espíritu de los demás), pues Descartes brinda primacía al todo y no a la parte, debemos considerar que somos parte de diversos todos. 

Nuestra satisfacción espiritual se halla en la satisfacción general, y para lograrla hay que seguir la virtud: tener una voluntad firme y tenaz, ser resueltos y constantes, y juzgar lo mejor posible, para actuar lo mejor posible.

La soledad del yo trae consigo la construcción de esta moral. Alcanzar la virtud nos plantea algo trágico,  una situación de tensión máxima: el redescubrimiento del yo tiene lugar aquí como descubrimiento de una última base de resistencia frente a un mundo vaciado de realidad, a un mundo que ha visto cómo el motivo inspirador de su unidad estallaba y se fragmentaba en una diversidad que es crisis.

Ante la unidad deshecha que plantea el mundo, Descartes ofrece una salida: pensar el mundo para pasar al yo, crear una actitud que contenga un sentido histórico, comprometido con todo lo que nos rodea. Es un pensamiento planteado dentro de la crisis, que dirige hacia una reconstrucción radicalmente: “ésta debería ser la obra de un ser humano nuevo”.

Bibliografía

J. B. Schneewind, La invención de la autonomía, una historia de la filosofía moral moderna, México: Fondo de Cultura Económica,  2010.


René Descartes, Cartas filosóficas, III, Argentina: Terramar, 2008. 

_____________, Discurso del método, España: Alianza, 1985.


____________, Meditaciones metafísicas, España: Alfaguara, 1977.


Toni Negri, Descartes político, o de la razonable ideología, España: AKAL, 2008.

(Toni Negri, Descartes político, o de la razonable ideología, España: AKAL, 2008, p. 125)
 

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más