Resultan verdaderamente preocupante los más de 49 mil estudiantes jaliscienses que abandonaron sus estudios debido a la pandemia por covid-19. Cabe señalar que este dato fue revelado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) a principios del presente mes de septiembre y no cabe duda de que el panorama escolar en esta entidad es el reflejo de la situación del país, ya que según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México se ubica en el primer lugar de deserción entre jóvenes de 15 y 18 años y el tercer lugar con más jóvenes que no estudian ni trabajan (Ninis) los que en Jalisco superan la cifra de 200 mil.
El organismo defensor informó que de acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Jalisco (SEJ), el nivel medio superior fue el más golpeado, pues desertaron 24 mil 91 estudiantes. De educación básica, 25 mil 210 menores abandonaron las aulas, 18 mil 488 de ellos estudiaban la secundaria y 6 mil 722 la primaria. Por su parte, la SEJ ha reconocido que, durante la pandemia, se perdió comunicación con el 1.5% del total de alumnos inscritos.
La cifra de niñas, niños y adolescentes que no asistieron a la escuela debido a la pandemia por covid-19 fueron señaladas por la mencionada comisión como históricas en Jalisco. Y desde mi punto de vista también refutan una de las desgastadas presunciones del presidente Andrés Manuel López Obrador. El mandatario federal durante los tres años se le ha escuchado presumir, una y otra vez, que ha bajado la deserción escolar en educación media superior gracias al programa de becas. Es sus mañaneras y en sus giras presidenciales, AMLO ha estado presumiendo que se otorgan becas de mil 600 pesos bimestrales, o sea 800 pesos mensuales, a estudiantes pobres de preescolar, primaria y secundaria.
Pero, investigadores y economistas de prestigiadas Instituciones académicas entre ellos el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), coinciden que las becas no pueden sustituir las deficiencias de los conocimientos básicos en los alumnos y que son fundamentales para que puedan continuar con su trayectoria educativa y tener acceso a mejores oportunidades en su vida. Documentan que las becas Benito Juárez que implementó el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, no tienen ningún efecto en la continuidad escolar de alumnos de secundaria a nivel medio superior. Es una solución que no tiene nada que ver con el fundamento detrás del problema.
Los expertos explican que no es posible retener a los alumnos en la escuela apostando todo a las becas. El apoyo sirve de poco y el dinero no va a alcanzar. Los mismos beneficiarios de las becas Benito Juárez afirman que no es suficiente porque tienen que hacerse cargo de los pasajes, comprar su ropa, los libros y otros materiales que ocupan en la escuela. Además, muchos estudiantes tienen que contribuir con el ingreso familiar para poder adquirir los alimentos de la casa. Con lo cual queda claro que las principales causas que propician la renuncia de los estudios son esencialmente económicas, la falta de recursos materiales que obliga a muchos jóvenes a dejar las clases por un trabajo, dada la precaria situación económica de sus familias.
Lo peor es que los gobiernos neoliberales fueron reduciendo poco a poco el presupuesto destinado a educación. Y ahora el presidente Andrés Manuel López Obrador en los hechos está colocando los recursos de la SEP en mínimos históricos. El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) señala que en el Paquete Económico que presentó la Secretaría de Hacienda ante el Congreso, el gasto en educación se ubicará en casi 884,000 millones de pesos en 2022. Esta cantidad representa una caída con respecto a lo aprobado en 2021. Sería el presupuesto más bajo en los últimos siete años, según este centro de investigación especializado en finanzas públicas.
Mientras el abandono escolar aumenta como consecuencia de la crisis. En medio del regreso a clases presenciales y los riesgos de contagio por covid-19, el Gobierno federal sigue apostando en Educación las Becas Benito Juárez para el nivel básico y medio superior, de acuerdo con lo previsto en el Paquete Económico 2022. Por lo que, ante el golpe de la Cuarta Transformación a la formación de los niños y jóvenes de nuestro país, el pueblo de México para poder avanzar hacia el camino de su liberación debe desenmascarar a sus falsos redentores. Es lo que nos indican los datos duros y alarmantes de la deserción escolar en Jalisco.
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