* Movimiento Antorchista conmemora en Ixtapaluca Día internacional de los trabajadores
El primero de mayo es el Día internacional de los trabajadores, por lo cual el Movimiento Antorchista en Ixtapaluca lo conmemoró con un desfile donde se pudieron apreciar imágenes de líderes proletarios de diferentes épocas y países, como Fidel Castro, Carlos Marx y el maestro Aquiles Córdova Morán.
Medio centenar de obreros de fábrica recibieron una conferencia titulada “La necesidad de la lucha obrera”, impartida por el maestro en Estudios de China por el Colegio de México, Ehécatl Lázaro, quien mencionó las siguientes ideas:
“El primero de mayo no es un día de fiesta y sólo para descansar. El 1 de mayo es un día de lucha. Es un día en el que los trabajadores de todo el mundo en diferentes países se manifiestan y recuerdan la lucha obrera. Este día es diferente porque es un día para luchar. Es un día en el que los patrones reconocen el derecho que los trabajadores tienen para luchar.
Esto no ocurre en México desde hace mucho tiempo. Se hacen desfiles pero son montados por los patrones y los sindicatos pero no son luchas auténticas. Por eso es importante lo que estamos haciendo, reunirnos hoy para conmemorar, porque de esta manera estamos luchando, intentando reivindicar el verdadero significado del 1° de mayo.
La clase obrera no ha existido siempre, es una clase que nace con el capitalismo. En el siglo XIX empieza a haber desarrollo industrial. La dinámica de las empresas hace que se fabrique más, se produzca más, y eso provoca que lasmercancías se empiecen a mandar a otros países, no sólo se queden en los países industrializados.
Hay desarrollo en las fábricas, hay más productos, pero el obrero vive peor, muerede enfermedad, no tiene educación y es más fácil que los corran de sus empleos. Es una contradicción, los trabajadores producen la riqueza pero están pobres, y quienes no trabajan que son los patrones cada vez son más ricos.
Esa contradicción no se la explicaban de manera sencilla, ni siquiera los científicos sabían a ciencia cierta las razones de esta contradicción.
Es Carlos Marx y Federico Engels los que explican la esencia de esos fenómenos, además descubren tres cosas importantes:
1. La lucha de clases, es decir, la imposibilidad de que el proletariado y la burguesía puedan coexistir de manera pacífica, sin que los intereses de uno le afecten al otro, pues eso ocurre en el capitalismo, lo que le beneficia al burgués es perjudicial para el obrero, y viceversa.
2. La explotación: en el capitalismo existe la apropiación del trabajo de otro. El trabajador produce todo pero no se queda con el producto de su trabajo. El capitalista no trabaja, solamente es el dueño de los medios con que se produce, de las fábricas, las máquinas, la materia prima, pero aun así el capitalista vive muy bien, en condiciones hasta de sobra, pero el obrero no, él trabaja mucho y sus condiciones son las peores.
3. El Estado, que tiene como objetivo el mantenimiento del estado de cosas existentes en el capitalismo.
Ese es el origen del 1 de mayo. El de la resistencia de los obreros a vivir así, a soportar su miseria, su falta de alimentación, de vivienda, salud, educación.
En Europa iniciaron las protestas contra los patrones, porque allá se desarrolló primero el capitalismo. Pero en México también hubo huelgas.
La Revolución Mexicana inició con las luchas obreras en Río blanco y Cananea. Es el obrero el que inicia la lucha, el que va a la vanguardia de la lucha de clases.
Los derechos de los trabajadores se consagraron en la Constitución porque hubo presión de los obreros, no porque los capitalistas fueran buenos, o justos, sino porque la presión obrera jugó su papel y tuvieron que incluir derechos de los trabajadores en la carta magna.
Después de la Revolución Mexicana el movimiento obrero era fuerte, se organizaban en sindicatos, pero esos sindicatos se empezaron a vender, a poner a favor de los patrones.
Los obreros se volvieron instrumento de los patrones. El obrero mexicano perdió toda iniciativa de lucha. Hay ocasiones en que los patrones impulsan la lucha obrera. Los capitalistas viven de lo producido por el obrero, todo lo que se fabrica no es para ellos, no es para almacenar; para que haya ganancia tienen que vender sus productos, y si los obreros no compran con sus salarios lo que ellos mismos producen, no se les regresa la inversión ni pueden tener ganancia.
Por eso a ellos les urge que el obrero tenga recursos para comprar, de ahí que muchas veces promueven que los obreros se muevan para elevarles artificialmente sus salarios, sin embargo siempre son insuficientes.
La Oxfam, que es una organización que mide los niveles de desigualdad en el mundo, dice que México es el país número catorce de riqueza mundial pero esta está concentrada en muy pocas manos. Un ejemplo de esto es que de 125 millones de mexicanos, la mitad, o sea unos 62 millones de personas, poseen juntas lo que Carlos Slim tiene solo.
Otros datos importantes son, por ejemplo, el de la cantidad de horas que trabajan los mexicanos, pues emplean más horas al trabajo que los alemanes, franceses y los norteamericanos y sin embargo gana mucho menos que ellos.
En los países desarrollados de Europa, el 25 % de la ganancia va al patrón, mientras que en México el 66% de la ganancia se queda en manos de los capitalistas. Esa es una realidad que viven los trabajadores.
La solución de los problemas de los obreros no va a llegar del gobierno, no va a llegar de los patrones, pues también un ejemplo claro es México, aquí el propio presidente ha declarado que los más beneficiados durante su gobierno son los empresarios, que él les ha cumplido los compromisos que habían antes de iniciar su mandato, entonces por qué pensaríamos que el gobierno va a hacer algo que ayude a los obreros.
¿Qué hacer? Despertar al gigante obrero. Las últimas vez que ese gigante despertó fue en la revolución mexicana, pero ahora es una clase adormecida, que no lucha, que se le ha olvidado lo que es la lucha revolucionaria.
El obrero debe despertar, debe tener iniciativa, capacidad para luchar por sus intereses. Tiene que despertar el gigante dormido.
Solamente cuando el Gobierno esté en manos de los obreros es como los trabajadores se podrán librar de la explotación, y eso no lo está proponiendo ningún partido, los únicos que estamos trabajando para que el poder esté en manos de la clase obrera somos los antorchistas, por eso debemos seguir la lucha de la mano del pueblo organizado en Antorcha. Muchas gracias”.
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