MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

En legítima defensa del antorchismo

image

Desde hace varias semanas, el Movimiento Antorchista se ha visto en la necesidad de dar respuesta a una serie de agresiones mediáticas en Puebla, uno de los estados donde más logros y presencia sociales tiene nuestra organización. Particularmente burdos y ofensivos han sido los ataques que nos ha lanzado Arturo Rueda, director editorial de Diario Cambio y conductor de un programa llamado "Juego de Troles", transmitido por la emisora Vértice 102.1 FM.

A continuación, pongo ante los ojos de los lectores dos ejemplos del "periodismo" que hace este señor, para que juzguen si son justificadas o no las razones y las medidas que hemos tomado y tomaremos para defendernos:

7 de abril. Una manifestación de miles de habitantes de Santa Clara Ocoyucan, algunos de ellos antorchistas, exige la destitución de su alcalde, comprobadamente corrupto, petición ignorada olímpicamente por todos los que deben tomar esa decisión a pesar de todas las soflamas que en público se lanzan contra este flagelo y las promesas de castigos ejemplares contra los prevaricadores del poder. Pues bien, Arturo Rueda de inmediato tomó partido en contra de los manifestantes y vociferó al aire: "¿Quiere usted mentarle la madre a los de Antorcha Campesina?". Acto seguido, un tal Zeus Munive, que funge como su patiño, le hizo segunda en su leperada: "Para que nos mande un bonito recordatorio a la mamá de don Aquiles Córdova Morán, así como de Juan Celis Aguirre (líderes nacional y estatal de Antorcha, respectivamente)".

26 de abril. En respuesta a nuestra exigencia en redes sociales para que se dejara de ofendernos, Arturo Rueda, Zeus Munive y otros que forman la claque que festeja hasta las peores ruindades que ahí se maquinan con disfraz de periodismo, convocaron a un vulgar concurso en la emisora arriba mencionada: darían boletos gratis para un baile con música de banda a quienes le mentaran la madre a los antorchistas. El ya mencionado Zeus Munive dijo lo siguiente, dirigiéndose a Rueda: "Tengo una propuesta Doctor (sic): para la gente que nos está escuchando y quiere ver a La Arrolladora el próximo jueves, por qué no hacemos la pregunta: ¿Cómo le recordaría a la más grande de su casa de Antorcha Campesina?". En seguida, Arturo Rueda reafirmó: "A ver, sí, sí, o sea, lo que estamos preguntándole a la gente, para que se gane sus boletos de La Arrolladora, es: ¿Cómo le mentaría la...(y de inmediato el bufón Zeus completó la frase: "la mamá") a los de Antorcha Campesina?".

En respuesta a estas cínicas ofensas pronunciadas al aire, a ese llamado a mentarnos la madre y a despertar el odio y la discriminación contra nosotros (de lo cual hay grabaciones), actos a todas luces ilegales y que constituyen un abuso de la concesión de una emisora de radio, nosotros publicamos volantes y mensajes en las redes sociales, reiterando nuestra exigencia principal: que se detuvieran los insultos y agresiones mediáticas contra los antorchistas, que se dejara de incitar al odio demencial contra una organización que es pacífica, se desempeña dentro de la ley y está formada por más de un millón de mexicanos; en algunas de esas publicaciones, nuestros compañeros de Puebla escribieron, refiriéndose a Rueda y compañía: "advertimos que, de continuar con las agresiones, por lo menos 10 mil antorchistas nos presentaremos en sus oficinas para ver si tienen ustedes los pantalones para mentarnos la madre frente a frente. Será, por todo lo que hasta aquí hemos narrado, un acto de legítima defensa".

¿Cuál fue la respuesta de los agresores, de esos que durante hora y media premiaron a quienes nos mentaron la madre con más saña, a cambio de boletos para un baile? Obviamente, no se disculparon ni reconocieron sus ataques, eso sería tanto como pedirle tunas a un maguey. Rueda empequeñeció moralmente, aún más desde que ha envilecido su oficio, al sustituir la información por la procacidad grotesca; se salió del verdadero motivo de nuestra queja, o sea, de las mentadas de madre en contra de los antorchistas y sus líderes; mintió abiertamente y engañó a su auditorio, a ése al que dice servirle: dijo que era víctima de amenazas, que todo era porque él y los demás eran unos auténticos próceres del periodismo que se habían atrevido a denunciar a los antorchistas, que éramos una "organización de hampones", soltó sin más argumentos y pruebas una de las "conductoras". Pero Rueda no se detuvo en ese panegírico dedicado a sí mismo, sino que anunció que él y su porra de léperos denunciarán ante la PGR no sólo al vocero estatal antorchista, Aquiles Montaño, por haber anunciado que irían miles de antorchistas a pedir a los que los ofenden que lo hicieran dando la cara, sino también levantaría cargos contra nuestro dirigente nacional, el Ing. Aquiles Córdova Morán, y contra el Ing. Juan Celis Aguirre, dirigente en Puebla, a pesar de que ambos no han dicho ni media palabra sobre este individuo y su cohorte de injuriadores. Por su parte, Zeus Munive se portó aún más achicado que su patrón, y dijo que "ellos no habían empezado". ¿Entonces quién inventó el concurso de mentadas de madre? ¿No fue usted el que dijo, señor calumniador, así, sin prueba alguna, que en los años 80, los antorchistas "despojamos a 80 mil totonacos"? ¿Pruebas? Ninguna. Pura pus y majadería.

dsa

Ante esta sucia salida, decimos lo siguiente:

1) Rueda miente y engaña al público con el que quiere congraciarse para salir del paso. Antorcha lo que ha hecho es defenderse de ofensas infamantes, de mentadas de madre lanzadas contra miles de gentes, por unos léperos con ínfulas de periodistas que conducen un programa (de alguna forma hay que decirles) llamado "Juego de Troles". Hemos respondido al locutor estrella de la emisora "Vértice" no por sus críticas torpes y malintencionadas, ni por su desaprobación de lo que decimos y hacemos los antorchistas (el elogio de ese señor nos infamaría más que sus ataques), sino porque, abusando de su condición de periodista y de la tribuna periodística de que dispone, él y su gente nos han insultado de manera brutal e injustificada, nos han acusado de delitos que nunca se han molestado en probar ni en denunciar ante autoridad competente (lo que los convierte en cómplices de tales delitos, según la ley); y ahora, ocultando que él fue el que nos ofendió, se llama ofendido y, en el colmo del cinismo, exige castigo judicial para los dirigentes nacionales y para el vocero en Puebla.

2) Es verdad que dijimos que iríamos masivamente a las oficinas desde las que se nos ofende, pero eso no es amenaza ni constituye ningún delito. Es simplemente el uso de un derecho establecido en la Constitución, mediante el cual se puede protestar por algo o demandar un derecho; en este caso, protestar porque desde una estación de radio se llame a ofendernos, a discriminarnos y a llamar al linchamiento moral contra un grupo de mexicanos. Quien crea que exageramos, debe tomar en cuenta que las agresiones verbales, a veces débiles y marginales al principio, con frecuencia desembocan en gigantescas y terribles agresiones físicas. Basta leer el discurso de Adolfo Hitler contra los judíos y otros grupos sociales en abril de 1923, cuando el jefe nazi aún era un oscuro líder provincial. Menos de dos décadas después, las víctimas de sus ataques verbales tuvieron que huir o fueron expulsados de Alemania y otros cientos de miles fueron exterminados en los hornos crematorios.

3) En virtud de que Rueda no solamente no reconoce que nos ofendió, sino que ahora pretende acusar ante la PGR al Ing. Aquiles Córdova Morán, quien no ha dicho ni media palabra sobre los ataques de Rueda, a pesar de ser él a quien más han ofendido estos tipos, debo decir, a nombre de todos los antorchistas del país, que no solamente mantenemos firme nuestra determinación de acudir por miles a pedir personalmente que se deje de ofendernos, sino que si Rueda y sus patrocinadores desde el poder, pretenden llevar las cosas hasta el grado de querer enlodar el nombre y el prestigio de nuestro dirigente nacional en un conflicto judicial armado con patrañas, no serán diez mil los convocados a protestar por la ofensas y las infamias proferidas por Rueda y compañía, sino que sería el inicio de una denuncia y movilización de cientos de miles de antorchistas en todo el país, en defensa de nuestra organización y su dirigencia nacional, que durarían tanto como fuera necesario, señalarían a quienes tenga que señalar que se encuentre tras bambalinas y adoptaría las modalidades legales que las circunstancias requieran. No es amenaza, es derecho constitucional a la defensa y la protesta.

  • Etiquetas:

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más