Ante los ya reiterados estragos de la pandemia de covid-19, las condiciones paupérrimas en las que vive la gente y, además, las próximas elecciones, a la ciudadanía no le queda nada más que su fuerza de trabajo y decidirse a escoger al dar su voto "libre, para seguir sobreviviendo en esta sociedad caótica.
El trabajo es la fuente de toda riqueza y condición básica y fundamental de toda la vida humana. Y lo es hasta tal punto que debemos decir que el trabajo ha creado al propio hombre. Por ende, el hecho de que no pueda trabajar el hombre en estos días de pandemia, lo orilla a la extinción de su vida. Esto, si viene siendo cierto, partimos desde un punto de la historia donde el trabajo sólo servía para satisfacer las necesidades de la humanidad, y conforme al desarrollo histórico de la sociedad, ahora es un medio de esclavitud y explotación de una clase por otra.
Esto se debe a que una pequeña parte de la sociedad (la clase dominante) es poseedora de los medios de producción mientras que la otra parte, mayoritaria, de la sociedad no tiene nada más que su fuerza de trabajo.
Hoy día las familias humildes no piden lujos ni cosas de otro mundo, lo único que piden es un poco de sensibilidad de sus semejantes para sobrevivir en estos tiempos de crisis. Hay muchas familias ricas empresariales, que tienen una vivienda con calefacción en estos días de frío, una despensa bien abastecida para alimentarse sin preocupaciones de que falte el pan en la mesa al siguiente día, recursos económicos para cualquier emergencia, pero la mayor parte de la sociedad son marginados, obreros, jornaleros, empleados asalariados, que viven al día y que no pueden darse el lujo de quedarse sin trabajar porque tienen familia que alimentar, calzar, educar, curar, etc.
Hay países como Cuba, por ejemplo, que, pese al bloqueo económico impuesto por el imperialismo, ha logrado salir adelante y ha demostrado cómo tiene que gobernar para su pueblo o Rusia que ha destinado todos sus recursos sin escatimar en ellos para proteger y salvaguardar al pueblo ruso y además en próximos días el apoyo con la vacuna contra la covid-19 para los mexicanos.
Pero la realidad es otra en nuestro país, a nuestros gobiernos no les interesa nada más que cuidar sus intereses políticos y tribales, a las familias ricas después de servirse con cucharón grande del fruto producido por el trabajo ajeno, no les interesa en qué condiciones viven sus trabajadores, siempre y cuando regresen al siguiente día para seguir produciendo riqueza.
Y es por eso que te invito a cerrar filas y organizarnos, que en las próximas elecciones no le demos nuestro voto a partidos ni a empresarios que no tienen la intención de atender las necesidades del pueblo humilde y trabajador, ha llegado el momento de que el pueblo organizado sea quien elija entre los suyos quien pueda guiarlos hacia una nueva sociedad más justa, donde la riqueza producida por el pueblo se distribuya equitativamente y se retribuya en obra social para mejorar las condiciones en donde vive la gente.
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