Maravatío, Mich.- Acompañados de padres de familia, maestros, directivos y estudiantes, se realizó la ceremonia de graduación en el Colegio de Bachilleres de la comunidad de Tupátaro, ubicada en el municipio de Senguio, de donde a decir de Violeta López Tovar, directora del plantel y dirigente antorchista en la región, pese a los problemas que arrojó la pandemia sumada a la crisis que azota a nuestro país y la falta de los recursos educativos por parte de la Cuarta Transformación las escuelas antorchistas siguen egresando a jóvenes cada año.
En dicha ceremonia estuvieron presentes Juan Martín Nicolás Jiménez, líder del Movimiento Antorchista en la región de Pátzcuaro, así como Misael Luz Gervacio, jefe de tenencia; Víctor Manuel Ponce, regidor de educación; y demás autoridades educativas de esta institución.
En su intervención, Nicolás Jiménez mencionó el sacrificio que deben de hacer los padres de familia para mantener a sus hijos estudiando, pues dijo, con la crisis que azota al país, los precarios salarios que perciben los padres y con una mala política de educación, eso se ha vuelto cada vez más complicado, lo que ha generado que muchos jóvenes se vean obligados a abandonar los estudios para ayudar a mantener económicamente a sus familias.
“Pero no solo los padres se sacrifican, también lo hacen los maestros, porque a pesar de las reformas educativas de la Cuarta Transformación, a pesar de sus bajos salarios y que muchas veces ellos deben poner de sus bolsillos para impartir una buena clase que sea atractiva y didáctica para los jóvenes, siguen aquí, trabajando por entregarle a la sociedad a jóvenes competentes, trabajadores, honrados, respetuosos y que el día de mañana trabajen y luchen por una patria más justa”, enfatizó el padrino de generación.
Agregó que el nombre de generación (“Las escuelas antorchistas, son escuelas progresistas”), hace honor al trabajo que durante muchos años ha venido realizando el Movimiento Antorchista en todo el país, pues dijo, las escuelas antorchistas buscan preparar a hombres y mujeres con una educación de calidad e integral donde no solo se desempeñen en lo académico, sino también en lo cultural, deportivo y hasta político: “los tiempos son cada vez peores para las clases trabajadoras, y eso deben saberlo los jóvenes que hoy egresan, es por eso que durante su educación preparatoria se trabajó para que fueran hombres más humildes y sensibles al sufrimiento ajeno y que el día de mañana puedan luchar por una patria más justa para todos”, finalizó.
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