MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Asesinatos de periodistas e impunidad, sello de la 4T

image

La profesión o el oficio del periodismo es una de las actividades que corren riesgo en nuestro país; esto depende principalmente del papel que asume el reportero o periodista al ejercer su profesión, y de las condiciones sociales y políticas en que vivimos. 

Pero aquel periodista que cumple con los elementos básicos de la profesión, de ser objetivo, imparcial y siempre publicar la verdad, siempre está en riesgo de afectar intereses políticos o económicos de personajes encumbrados o de individuos que tienen alguna influencia real sobre el gobierno. 

Además de que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha asumido el papel de hostigador de los medios de comunicación y de los reporteros que han señalado o hecho alguna crítica a su administración e, incluso, ha llegado al grado de exhibir en la mañanera información confidencial de aquel que se atrevió a publicar sobre el origen y la posesión de las mansiones de su hijo mayor en Texas, Estados Unidos (EE. UU.).

Según datos publicados recientemente, desde el año 2000 a la fecha, han asesinado en México a más de 150 periodistas, lo grave del caso es que la mayoría estos crímenes siguen impunes. 

En México, en lo que va del sexenio de la 4T, hay un número récord de asesinatos en agravio de periodistas. La empresa de consultoría política TRedearch Internacional, durante los cuatro años de gestión de López Obrador, han asesinado a 39 periodistas, (tan solo en 2022 hay una lista de 17 periodistas), mientras que en el sexenio de Enrique Peña Nieto fuero 47; en el de Felipe Calderón se registraron 48; en la administración de Vicente Fox fueron asesinados 22 periodistas. Por los datos antes señalados no cabe duda de que la 4T está ganando la medalla por ser la administración federal que más asesinatos de comunicadores ha registrado, en tan solo 4 años de gobierno.

Ejercer el periodismo en México es difícil y riesgoso, pues los reporteros están expuestos a varios peligros, cuya función especifica es informar a la ciudadanía del acontecer diario, sin embargo, cada trabajo y género del periodismo requiere de información más detallada y precisa, al que hay que sacar a la luz cuando la información se obtiene de una fuente confiable, pero a la vez riesgosa, es aquí donde empieza el verdadero peligro, principalmente para aquellos que tienen la posibilidad real de publicar sus trabajos en los medios con cierto prestigio o influencia tanto nacional como regional.

Por otro lado, es una profesión con muchos riesgos y muy poca lucrativa, muchos periodistas no gozan de un salario fijo y permanente, debido a que la tecnología y el uso del internet le ha ganado espacio a la prensa escrita y esto, en alguna medida, ha ocasionado el cierre de las imprentas editoras y por consiguiente muchos periodistas han sido despedidos y han perdido su fuente de empleo.

Independientemente de que el oficio del periodismo sea riesgoso, de ninguna manera se justifica privar a los periodistas de la vida.  El problema es que, en nuestro país, tal parece que incitar a la violencia y generar un odio hacia los comunicadores es una tarea que el presidente está realizando desde la tribuna más poderosa e influyente del país, es decir en la mañanera. Llama la atención que de esta política del presidente sea el origen de tanta agresión al gremio, pues la organización Artículo 19 publicó que, durante el primer semestre de 2022, registró 331 agresiones contra periodistas y medios de comunicación, esto representa un incremento de 51.83 por ciento de agresiones, en comparación con el mismo periodo del sexenio anterior.

El último asesinato de un periodista ocurrió en la capital de Guerrero, es una muestra de ello, con este suman ya 15 periodistas asesinados en lo que va del 2022. Fredid Román, según los medios, había publicado un trabajo relacionado con la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en el que criticó la actuación del actual Gobierno federal sobre este caso.

Nuevamente nuestro país adquiere fama, por llamarla de alguna forma, de que es el país, que, sin tener una guerra, es el más peligroso para ejercer el periodismo. México solo está por detrás de Afganistán y Siria. 

México fue calificado por la organización Reporteros Sin Fronteras como el país sin guerra más peligroso para ejercer el periodismo, sólo por detrás de Afganistán y Siria. Aunque la realidad nos dice que, si bien es cierto que no hay aun una guerra civil, en los hechos tal parece que, si la hay, recientemente hemo vivido en las últimas semanas muchos hechos violentos protagonizados por la delincuencia, por ejemplo durante los narcobloqueos ocurridos la noche del pasado 11 de agosto en Ciudad Juárez, Chihuahua, murieron cuatro trabajadores de la estación de radio Mega Radio Networks, que fueron Allan González, locutor del programa radial Switch 105.9 FM; Lino Flores, del área de Promociones; Armando Guerrero, gerente de Operaciones, y Alex Arriaga. No es casual que sean los trabajadores de la comunicación unos de los afectados directamente por los grupos delincuenciales. 

Los mexicanos que buscamos una patria justa, con desarrollo e igual de oportunidades para todos, repudiamos estos hechos violentos, no solo contra los periodistas, sino con todo lo que significa violencia y asesinatos en nuestro país; nos solidarizamos en las luchas del gremio periodístico que buscan justicia y castigo a los culpables y los invitamos a formar un frente común para cambiar el estado de cosas que lastima a los más humildes trabajadores mexicanos. Debemos luchar por un país con respeto por la vida y ejercer una profesión con garantías

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más