Los mexicanos debemos unirnos en un sólo frente que esté integrado por todos los sectores sociales de nuestro país, es necesario seguir luchando ahora más que nunca porque el Gobierno federal no atiende las demandas más elementales en la zona urbana y más aún en las comunidades rurales donde los pobladores tienen que acostumbrarse a vivir sin obras y servicios públicos.
La situación empeoró por la crisis sanitaria y en México es la hora que no se ve el problema con seriedad como sí lo hicieron otras naciones del mundo que incluso cerraron sus fronteras, en consecuencia, nosotros ocupamos el primer lugar de mortalidad por covid-19, la pandemia solamente vino a evidenciar las carencias, abandono y miseria en el que nos encontramos.
Se enfermó el presidente y aún así sigue siendo el mal ejemplo para los rebeldes que se niegan a usar cubrebocas, barrera que es señalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como una que sí tiene una función de protección, pero el mandatario no lo admite, lo que nos hace pensar que sus imitadores creen ciegamente en su postura en este y otros temas. Y como dice que cada quien es responsable de su salud individual se deja de lado que dada su investidura tiene que incidir y está obligado a procurar el problema de salud pública que al día 11 de febrero sumó 171 mil 234 decesos y 2 millones 164 mil 636 contagiados.
Y qué decir del sector educativo cuando nadie estaba preparado para las clases en línea tanto por la falta de capacitación, de herramientas digitales e incluso de energía eléctrica en zonas alejadas porque aunque la Federación diga que en México todo está bien, niños, jóvenes y maestros tienen problemas por no contar con alguna de los elementos mencionados.
Además, la Secretaría de Educación se encuentra en manos de funcionarios de un perfil académico que nada tiene que ver con la misma, de ese modo programas y sistemas implementados para las clases han sido insuficientes, de bajo aprovechamiento donde educandos y maestros se sienten abandonados, con problemas de depresión y falta de entusiasmo, a lo que hay que poner atención. La realidad es que los planes educativos en esta nueva condición no han logrado que los estudiantes tengan el interés de llevar a cabo su aprendizaje y aprovechar la enseñanza desde casa sin que exista alguna otra opción por el momento.
En lo referente a la economía no andamos mejor, se han perdido 2.5 millones de empleos, las personas que fueron despedidos por la pandemia no tienen un ingreso para pagar la renta o los servicios, tampoco para la alimentación y la educación de sus hijos. Sin lugar a dudas ya se tenían problemas y la pandemia solamente agravó y evidenció la falta de oportunidades que tenemos.
Por estas razones, invito a los mexicanos a unirse y organizarse en el Movimiento Antorchista Nacional, un proyecto político que desde hace 46 años agrupa a estudiantes, comerciantes, transportistas, maestros, amas de casa u obreros, en la organización todos cabemos y hemos logrado con nuestra lucha decenas de obras en unos 30 municipios de Zacatecas, y lo mismo a lo largo y ancho del país. Súmate a Antorcha y construyamos juntos un mejor país, desarrollado y progresista, en el que todo aquel que quiera trabajar tenga un empleo que le haga ganar un sueldo digno y cubra todas las necesidades de su familia, donde se cobren los impuestos progresivos; es decir, que paguen más los que ganan más y que los que ganan menos paguen menos, además de que los impuestos sean dirigidos a obra pública y servicios sociales en beneficio de las mayorías.
Esto se puede lograr con la condicionante de que nos juntemos los pobres, todos aquellos que si no salen a trabajar hoy no tendrán el sustento para el hogar, aún tenemos tiempo para sumarnos y que el Gobierno federal no se atreva a seguir golpeando con sus políticas públicas a los pobres de este país. Unidos y organizados podemos defendernos entre todos del mal gobierno de la 4T.
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