México atraviesa una serie de problemas serios en todos los rubros, como el problema de la sequía y afectación al campo, el notable retroceso en el sistema educativo, las constantes quejas en el sistema de salud, el incremento en la canasta básica, el terrible problema de inseguridad que ha dejado miles de pérdidas humanas, la falta de vivienda digna, la falta de agua potable para cientos de colonias en el país, los constantes problemas con la CFE, la falta de inversión extranjera, la persecución a periodistas, las carreteras en pésimas condiciones.
Asimismo, el problema de los migrantes que afecta a varios estados, pero, en particular, a las ciudades fronterizas como Ciudad Juárez, Chihuahua, la constante corrupción que se vive en la administración de la 4T. En fin, son muchos los problemas por los que atraviesa nuestro país y de quien se esperaba que resolviera o por lo menos amortiguara esta situación, no estuvo a la altura y no figuró como presidente, más bien, durante estos más de cinco años en el poder prefirió hacer campaña.
AMLO decidió seguir siendo candidato echando culpas por todo lo ocurrido. Él, como presidente, tenía la forma de resolverlo, pero no fue así; la esperanza de México que encabezó Morena, partido del político tabasqueño Andrés Manuel López Obrador y líder de ese partido, ya se perfila como un total fracaso.
Usando las famosas “mañaneras”, el jefe del Ejecutivo hace propaganda a su partido, a su movimiento, calumnia a la oposición, miente cuando los datos no le concuerdan con la realidad, señala, descalifica, se niega a escuchar, ofende, niega lo que está ocurriendo afuera en las calles.
Desde las mañaneras, AMLO marca su agenda política, señala los temas que quiere que se conozcan y omite otros de mayor importancia. Las mañaneras, como dicen algunos politólogos, se han convertido en la forma de Gobierno de la 4T.
Esta es una realidad preocupante y que a todos los mexicanos nos debe interesar, ya que cada decisión mal tomada por el presidente afecta al pueblo, como por ejemplo su estrategia de “abrazos no balazos” que es todo un fracaso, pues el número de muertos, gracias a que no se combate a la delincuencia como debe ser ya supera los 156 mil.
Todo lo que decide el jefe del Ejecutivo federal afecta, y al final del día es el pueblo quien termina pagando los platos rotos por sus pésimas decisiones.
Qué decir de su decisión de desaparecer el Seguro Popular todo por ser una creación del expresidente Vicente Fox, emanado del Partido Acción Nacional, y argumentando que era un sistema corrupto para después crear el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que fue un dolor de cabeza para el presidente al grado que lo tuvo que desaparecer.
La cancelación del aeropuerto en Texcoco para crear el AIFA sigue sin dar resultados; a la eliminación de la escuela de tiempo completo y la creación de la Nueva Escuela Mexicana no se le ve ni pies ni cabeza.
En fin, todo lo que decide el jefe del Ejecutivo federal afecta al pueblo y al final del día es el pueblo quien termina pagando los platos rotos por sus pésimas decisiones.
Se acercan las elecciones del 2024 y México tiene una gran oportunidad de corregir el rumbo del país; está claro que la continuidad que propone la candidata de Morena de continuar con la misma política de la 4T hundiría aún más al pueblo.
Si ya estamos mal no queremos estar peor; los ciudadanos deben hacer un análisis serio de lo que está pasando y el día de las elecciones tomar la mejor decisión.
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