Actualmente, nuestro país ha sido sacudido terriblemente por la covid-19, la necesidad de supervivencia nos obligó y sigue obligando a adoptar nuevas formas de convivencia y definitivamente las relaciones humanas jamás volverán a ser las mismas.
Los efectos adversos que trajo consigo la crisis, ya mucho se ha dicho, se ha analizado a profundidad, las consecuencias de estos ya casi tres años de pandemia. En el caso del sector educativo de nuestro país. Los estudiantes han perdido valiosos años de aprendizaje, el poco nivel cultural en el que se desarrollan no garantiza que el auto aprendizaje haya sido exitoso, cada día ante la crisis económica que apenas comienza y ante la necesidad de priorizar lo necesario para vivir se incrementa el número de jóvenes que desertar de su preparación académica.
Hoy, más que nunca, los estudiantes deben ser la vanguardia que encabece con determinación y claridad el destino de nuestra nación, por ser ellos quienes tiene la oportunidad de asimilan de primera mano el conocimiento que la humanidad ha adquirido a lo largo de su historia y precisamente porque solo aquel que tiene el conocimiento pleno de su realidad puede tener la capacidad de cambiarla.
Para los jóvenes hoy en día tener opciones para continuar con sus estudios, significa una esperanza para lograr las metas que un día se ha propuesto, aunque cada vez son pocos. Así pues, una alternativa y una esperanza para continuar sus estudios, son los albergues estudiantiles, Las Casas del Estudiante, en donde se promueven los clubes culturales de danza y baile folclórico, teatro, música, declamación, dibujo y desde luego la oratoria. Los resultados de la funcionalidad de dichos alberges saltan a la vista, de ellos han emanado profesionistas más sensibles, disciplinados y con verdadera vocación de servicio.
Estos albergues son una alternativa en la cual, los jóvenes no solo cuentan con un techo seguro, sino en la cual a la par de fomentar un ambiente de respeto y sana convivencia se promueva la verdadera vocación académica y se formen profesionistas que no solo se especialicen en su carrera sino además se fomente y desarrollen sus habilidades culturales y deportivas.
Ante la situación de las familias humildes, la deserción escolar, la creciente crisis económica, por estas y más razones la creación de las casas del estudiante son una verdadera bocanada de aire fresco para los jóvenes que quieren culminar su preparación académica, dar la lucha por espacios dignos en donde se ofrezcan las condiciones óptimas para que desarrollen sus capacidades académicas y culturales, por ello es una necesidad impostergable.
Ante la falta de sensibilidad gubernamental para llevar por sendero segura la educación y garantizar la salud de los educandos, las casas del estudiante promovidas por la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios Rafael Ramírez (FNERRR), para ofrecer a los estudiantes que desean continuar su preparación académica y que no cuentan con un lugar o con recursos económicos para rentar un hospedaje cerca de los centros universitarios.
Con ustedes al frente y el pueblo organizado y consciente sigamos trabajando hombro con hombro, entre todos debemos crear un proyecto de una educación democrática, critica, científica y popular. Es la tarea pendiente.
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