AL C. P. MARIO MORENO ARCOS
Candidato del PRI-PRD, a la gubernatura del Estado
A LA LIC. BEATRIZ VÉLEZ NÚÑEZ
Candidata a diputada federal por el Distrito 07
AL ARQ. CÉSAR ARMENTA ADAME
Candidato a diputado local por el Distrito 02
Los triunfadores de la elección del próximo domingo 6 de junio en nuestro estado, tendrán ante sí, la responsabilidad de conducir con un alto intelecto el destino de los guerrerenses en los próximos años. El abandono en que las autoridades de todos los niveles de gobierno mantienen a la ciudadanía, provocan mayores dificultades en un estado que por muchos años no ha podido salir de la pobreza a pesar de que los gobiernos han manejado anualmente a nombre del pueblo grandes cantidades de recursos económicos para atender sus necesidades. Como sucede casi en todo México, la calidad de vida de los trabajadores mexicanos no transita hacia el mejoramiento, sino que cada vez que los organismos nacionales e internacionales evalúan los factores que reflejan el nivel de vida en que se desenvuelve el pueblo, los indicadores informan de un deterioro constante que ubican a nuestro país como una nación que mantiene a sus habitantes en una escandalosa desigualdad. Esto no solo sucede en los actuales tiempos, sino que ya desde hace algunas décadas, el empleo, la educación, la salud, la vivienda, los servicios públicos, la seguridad, los espacios y tiempos de recreación, se alejan cada vez del alcance de los trabajadores, provocándoles más preocupaciones en su diario vivir.
Actualmente, el gobierno de Morena que preside Andrés Manuel López Obrador, en sus casi tres años, ha cerrado completamente la llave por la que fluían los presupuestos con que se atendieron algunas veces los grandes problemas y necesidades de los mexicanos. Aunque diga a cada rato que México camina hacia una transformación benéfica para el pueblo esto no es verdad. La supresión de los programas sociales con que se atendían las inversiones en el campo, así como la eliminación de los programas para ejecutar obras que resuelven la carencia de servicios públicos de los ciudadanos que habitan en los pueblos y colonias, acrecientan peligrosamente la vida de los productores de la riqueza. La pandemia que azota al mundo vino a descubrir el rostro siniestro del actual gobierno mexicano que, sin medidas de protección, sin medicamentos y sin apoyos para resistir el aislamiento necesario, ha dejado morir a casi un cuarto de millón de mexicanos.
Los antorchistas siempre supimos que el gobierno de la 4T no resolvería los graves problemas del país, y comprendimos mucho antes, que los gobiernos pasados para corregir los males que laceran la vida de los mexicanos sumergidos en la pobreza, debieron centrar su atención en promover el empleo para todos los mexicanos que se hallen en edad de trabajar, con salarios suficientemente retribuidos que alcancen a cubrir los satisfactores que les dignifiquen la vida; que se debió y debe invertir un porcentaje justo del presupuesto federal en obras sociales para el pueblo y en implementar una reforma fiscal que libere a los trabajadores de los pesados impuestos. Nada de esto se está haciendo y, por tanto, el país bajo la conducción de Morena va en dirección opuesta al mejoramiento. Por éstas y por muchas otras consideraciones, y observando las acciones dañinas provocadas a la población por el gobierno de la 4T, decidimos llamar a los militantes del antorchismo a participar en esta contienda electoral por opciones diferentes a las ofertas de los candidatos de Morena. Y tratando de contribuir al buscado triunfo de los candidatos de la alianza PRI-PRD en el estado, nos sumamos a inclinar nuestro voto a favor de esta alianza. La perseverancia de todos los involucrados en las campañas ha elevado a la alianza a un nivel de competencia que le da verdaderas posibilidades de triunfo. Si así sucede, y superada la pasión electoral, instamos a los triunfadores a tener entre sus planes, las solicitudes y demandas que les fueron entregadas por los grupos organizados del Movimiento Antorchista en los diversos eventos, para su posible solución en los tiempos prudentes. En especial, la solicitud de la regularización de la colonia Nueva Revolución de Chilpancingo y la necesidad de insumos para hacer producir las tierras de los campesinos.
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